Veranos azules en una costa llena de sorpresas
Localidad costera plena de atractivos
La provincia de Málaga, entre muchos otros tesoros, alberga una localidad costera plena de atractivos, belleza, animación y entorno natural. Nos estamos refiriendo a Nerja, preciosa villa marinera malagueña ubicada al este de la comarca andaluza de la Anarquía, en plena costa del sol. Se trata de una población que antiguamente tenía la base de su economía en la agricultura y la pesca, actividades que ahora han pasado a segundo plano debido al enorme auge del turismo nacional e internacional del enclave. De hecho, de los cerca de veintidós mil habitantes de Nerja, casi una tercera parte es de origen extranjero, fundamentalmente británico.El turismo de esta localidad ha sido atraído tradicionalmente por las playas, magníficos arenales de aguas tranquilas y transparentes, pero también por la presencia de la espectacular Cueva de Nerja, cuyo descubrimiento supuso una inyección de vitalidad e ingresos para el pueblo por parte del turismo. Y cómo no, no podemos dejar de mencionar el acontecimiento que supuso para este pequeño pueblo el rodaje en su territorio de la emblemática serie televisiva de los años 80 "Verano Azul", a través de la cual toda la población de nuestro país y buena parte del extranjero conoció el maravilloso litoral y el encanto de la zona.
Además de series de televisión, cuevas y playas, desde Nerja cabe la posiblidad de realizar rutas de senderismo por las sierras y montes que circundan la localidad, desde los cuales contemplar impresionantes vistas de los valles, los picos, el mar y las poblaciones. Los viajeros quedarán igualmente enamorados de la típica gastronomía malagueña, con delicias como los espetos de sardinas, los distintos gazpachos y salmorejos o la sabrosa repostería de influencias árabes que ofrecen sus obradores y pastelerías.
Los días en Nerja son jornadas de relax y naturaleza, de animación, tapas y diversión. Las noches de primavera y verano se ven jalonadas de constantes fiestas y eventos, desde las bellas Cruces de Mayo hasta la alegre Noche de San Juan, plena de hogueras y ritos paganos. Música y fiesta hasta el amanecer; días de naturaleza y de excursiones, siempre acompañados de la hospitalidad que caracteriza a los habitantes de este hermoso enclave.
Magníficas playas y sierras, y unas cuevas inolvidables
Quienes contemplaron la belleza de Nerja a través de la pantalla de televisión, acompañando a entrañables personajes como Chanquete, Julia, Tito o Piraña en sus aventuras, no podrán sino recordar las hermosas playas en las cuales discurrían los plácidos y azules días de verano. Dentro de la costa del municipio de Nerja se suceden las calas y arenales, entre las que destacan la de Burriana y la de la Torrecilla por la Bandera Azul que año tras año las designa como playas de óptima calidad en lo que respecta a equipamiento, servicio, calidad de las aguas y limpieza de la arena. La más concurrida, de tipo familiar, es la playa Burriana, rodeada de un magnífico entorno natural de acantilados rocosos y montes. La playa de La Torrecilla, también distinguida por su calidad, está flanqueada por un Paseo Marítimo peatonal desde la cual se puede contemplar pausadamente. Debe su nombre a las ruinas de una antigua torre, y se accede a ella desde la vecina playa El Chucho, un pequeño arenal ubicado en la salida al mar del río Chillar y que se une también con el Playazo. El nombre de este arenal está bien justificado debido a su gran extensión, y su belleza se ve realzada por la Vega de Nerja, que forma parte de su entorno. Otras dos playas a destacar en la localidad de Nerja son el Salón, pequeña extensión de arena al cual se accede directamente desde el casco urbano de la localidad, y la Caletilla, cuya hermosura está incrementada por la presencia de los acantilados. La playa de Calahonda es muy conocida y popular, así como otros bellos arenales como el Chorreo, Carabeo o Carabeillo. Y para quienes disfruten caminando y recalando en rincones especialmente solitarios, recomendamos acercarse hasta la Cala Barranco de Maro. Su acceso por carretera se ve interrumpido en cierto punto desde el cual sólo se puede acceder a pie, bajando el Barranco de Maro hasta llegar a la cala a través de una senda plagada de cañaverales y vegetación.
La belleza natural del entorno de Nerja se prolonga hacia las sierras el interior. El macizo montañoso que conforman los Parques Naturales de las Sierras de Tejeda, Alhama y Almijara constituye un impresionante conjunto, con una enorme extensión que acoge hasta ocho municipios en total. Las rutas señalizadas pensadas para facilitar la práctica del senderismo descubren al viajero bellos caminos y fantásticos miradores naturales, así como la posibilidad de descubrir la presencia silenciosa de las rapaces, o la majestuosa silueta de la cabra montés.
Dentro de la naturaleza, pero también como parte de la obra del hombre, la Cueva de Nerja se abre a viajeros y visitantes con toda su espectacular escenografía. Situada al lado de Maro, está separada en dos áreas: una abierta a los visiantes, y las Galerías Altas y Nuevas. El enorme tamaño de esta cueva, que alcanza casi cinco kilómetros de galerías exploradas, así como sus formaciones kársticas, sus excavaciones arqueológicas y sus pinturas rupestres, han contribuido sobremanera a su fama mundial. A día de hoy, la Cueva de Nerja constituye Bien de Interés Cultural con categoría de Zona Arqueológica, además de Monumento Histórico-Artístico y Bien de Interés Cultural.
En el siglo XIX, la localidad de Nerja se vio asolada por un terremoto que destruyó su centro urbano, lo que significa que apenas queda un casco histórico auténtico en la población. Aún así, en el barrio pesquero todavía es posible contemplar algunas pintorescas casas de pescadores, con sus encalados blancos y sus típicas callejuelas. En el centro de la localidad se ubica el punto conocido como Balcón de Europa, que es en realidad un mirador desde el cual la panorámica sobre el mar resulta impresionante. Fue el rey Alfonso XIII quien, a finales del siglo XIX, propuso la construcción del mirador con motivo de una visita que realizó para comprobar los daños producidos por el terremoto. La sensación de encontrarnos en el "fin de Europa" y contemplar desde este punto el comienzo de otro continente, África, inspiró el nombre que se le otorgó a dicho mirador.
Las edificaciones religiosas de la localidad de Nerja sorprenden por su belleza y los tesoros artísticos que albegan. La Iglesia de El Salvador se erigió en el siglo XVII, y destaca por su torre y su campanario, así como por las pinturas atribuidas al artista Francisco Hernández. El estilo barroco alcanza gran belleza en la Ermita de las Angustias, cuyos frescos pertenecen a la escuela de Alonso Cano, mientras que la arquitectura popular tiene también su representación en la Iglesia de las Maravillas, ubicada en Maro. Otras obras interesantes del entorno de Nerja son las dedicadas a la arquitectura civil, como el Acueducto del Águila, del siglo XIX, o el denominado "Ingenio de San Antonio Abad", fábrica que constituye uno de los escasos representantes de la actividad azucarera, característica hace años de la región de Málaga.
Y para terminar, un aviso a mitómanos y fanáticos de los años ochenta: en pleno núcleo urbano de Nerja, cerca de la Ermita de las Angustias, se localiza el parque Verano Azul. Además de ser una zona verde muy popular en él se encuentra el barco de Chanquete, "La Dorada", testigo intemporal de una serie que marcó la infancia y la adolescencia de toda una generación en nuestro país.
Pucheros y gazpachos en tierras de magníficos pescados
El entorno natural de Nerja es el origen de su gastronomía. Tanto los productos de la huerta y los viñedos, como los procedentes de la ganadería o del mar, configuran un firmamento de privilegiadas materias primas que dan origen a una cocina basada fundamentalmente en la dieta mediterránea. Nerja, como parte de Málaga, es tierra de potajes, pucheros, parrilladas de pescado, gazpachos y ensaladas. Además de disfrutar de los sabores de estas especialidades, los chiringuitos y restaurantes a pie de playa, así como las típicas tascas, permiten a los visitantes disfrutar de lugares llenos de encanto y magníficas vistas,en los que combinar la experiencia gastronómica con la alegría andaluza y la contemplación de la naturaleza.Dentro de las recetas tradicionales de Nerja podemos destacar sus potajes de fideos, realizados sobre todo a base de pescado y que alcanzan su punto de excelencia cuando se preparan "de un día para otro". También fruto de la cocina popular son las migas, que se elaboran con harina especial y se acompañan de pescado frito, uvas, pimientos y otros ingredientes a escoger por el cocinero. El arroz caldoso con almejas, las "patatas a lo pobre" acompañadas de huevos fritos, el pulpo con tomate, el ajoblanco (especie de gazpacho de almendras, aceite, ajo y uvas), la "ensalada imagora", el exquisito besugo de Burriana, el pisto o las herreras (pescado de la zona) a la brasa, así como las clásicas tortillas de bacalao con perejil, no deben faltar en ningún repaso por la gastronomía de Nerja que se precie.
Para rematar una antológica comida, siempre podemos acudir a la deliciosa repostería árabe de la zona, en la cual las tortas de aceite (también llamadas tortas sanjuaneras y que cada localidad malagueña prepara a su estilo) preparadas con licor matalahúva son el emblema por excelencia. Las pasas de la comarca de la Axarquía son también una delicia única en su género, así como los distintos vinos dulces con Denominación de Origen Málaga que alcanzan la excelencia en la región, existiendo su elaboración desde hace ya cientos de años.
Mar, tierra y ritos paganos durante noches inolvidables
Como en muchos otros puntos de Andalucía, el calendario festivo de Nerja se abre en el mes de enero con la festividad de San Antón, los días 16 y 17 de enero en la zona de Maro. Estas celebraciones datan del siglo XVII, lo que las convierte en todo un tesoro cultural, y aúnan ritos paganos relacionados con la fertilidad y la ganadería con tradiciones religiosas. San Antón es el patrón de los animales domésticos, y durante estas jornadas tiene lugar su bendición. Pero además, los vecinos de la localidad encienden hogueras a medianoche para "quemar a los diablos" que tentaron al santo y conseguir así protección para sus animales. La degustación de productos y guisos autóctonos junto a las hogueras es parte de la noche del 16, además de la misa del día siguiente y la procesión en honor del santo, que además es el patrón del pueblo.
Los Carnavales se celebran con intensidad en Nerja, previos al recogimiento y las procesiones de Semana Santa. Además del despliegue de disfraces y chirigotas característicos de los carnavales andaluces, en la localidad se realiza la elección del Rey Momo y de las Ninfas del Carnaval, así como el peculiar Entierro del Chanquete que pone fin a las celebraciones. Pasada la Semana Santa, a principios de mayo, se celebran las Cruces de Mayo, una fiesta que data del siglo XIX basada en la tradición que mandaba a los jóvenes del pueblo cantarles canciones a las mozas (de ahí la expresión popular "echar los mayos"). Las llamadas cruces son monumentos realizados con flores y otros ornamentos que adornan los altares erigidos en casas, patios y calles. La música y la tradición se alían para aportar alegría y diversión a las calles hasta bien entrada la noche. En estos días es típico degustar distintas recetas típicas de la región elaboradas a base de miel de caña, sobre todo la "arropía", dulce preparación hecha con miel cocinada y amasada.
San Isidro es el patrón de los labradores y se festeja también en Nerja, el día 15 de mayo. La misa rociera y la romería que parte del Balcón de Europa y que traslada al santo hasta la Cueva de Nerja, son los eventos más reseñables de las jornadas. Y ya comenzando el verano entramos en la ancestral Noche de San Juan, una celebración familiar que tiene como centro neurálgico las playas. En ellas se hacen hogueras para quemar a los juás; los participantes saltan las brasas y se bañan en el mar para poder pedir tres deseos. Es tiempo de barbacoas, espetos de sardina y tortas sanjuaneras. Otra celebración íntimamente ligada al mar es la fiesta de la Virgen del Carmen, el día 16 de julio, que se festeja con una moraga popular y una procesión marítima en la que se lleva a la imagen de la Virgen a bendecir las aguas. Los fuegos de artificio en la playa de Calahonda son el remate espectacular de estas jornadas.
En los meses de julio y agosto se celebra el Festival de Danza Cueva de Nerja, con espectáculos realizados en las cuevas y que data de los años 60 del siglo XX. A comienzos de septiembre se organiza en Maro la Feria de las Maravillas, fiestas patronales de dicha población y que se relacionan directamente con la cosecha. En el mismo mes también se celebra el Día del Turista, con actividades en el Balcón de Europa que conmemoran el descubrimiento de la Cueva de Nerja, y ya en octubre son las fiestas patronales del núcleo urbano de Nerja en honor a la Virgen de las Angustias y San Miguel Arcángel. Se extienden entre los días 8 y 12, y a lo largo de las jornadas se celebran actos como la procesión de la Patrona o la misa del día grande (el 10 de octubre), acompañados de toda la alegría de las casetas, festivales flamencos, actividades musicales, exposiciones, desfiles y verbenas.
Alegría y diversión junto al mar; prehistoria a nuestro alcance en magníficas cuevas; rutas por sierras plenas de vegetación y paisajes; delicias de mar y tierra sobre la mesa; hospitalidad tradicional... Nerja es la elección perfecta para pasar el más azul de los veranos.
