Una ciudad de descubridores, puestas de sol y humedales
Huelva, entre el mar y el cielo
Dentro de la ciudad, el casco antiguo fue destruido desafortunadamente por un terremoto en el siglo XVIII; pero posteriormente, sobre todo durante el siglo XIX y la primera mitad del XX, se levantaron bellos edificios que hacen que merezca la pena hacer un recorrido por la ciudad. Si a esto le sumamos las maravillosas puestas de sol que pueden disfrutarse desde distintos puntos, los paseos por los antiguos muelles industriales, la magnífica gastronomía que puede degustarse en los restaurantes, bares y tascas y la cercanía de estupendas playas (como la del Espigón) y humedales, descubriremos que Huelva es una ciudad inolvidable y con mucho que disfrutar.
La vida cotidiana es muy animada en Huelva. Al carácter alegre y acogedor del pueblo andaluz se le une la profusión de festividades, acontecimientos culturales y deportivos que vive la ciudad a lo largo de los meses del año. En Huelva es posible conocer una Semana Santa sobrecogedora y espiritual; partir rumbo a la Romería del Rocío entre festejos; disfrutar de las grandes Fiestas Colombinas, o acudir a eventos como la Copa del Rey de Tenis o el Festival de Cine Iberoamericano. Hay acontecimientos y celebraciones para todos los gustos, y además las calles, terrazas y bares cuentan con una animada vida diurna y nocturna que satisfará al más exigente amante de la fiesta.
Además, en la ciudad de Huelva y sus alrededores hay muchas cosas que descubrir. Paseando por sus calles y rincones, el viajero disfrutará del patrimonio y la cultura, que en muchos puntos recuerdan las hazañas de Cristóbal Colón y sus viajes rumbo al descubrimiento de América; pero también podrá relajarse tapeando en bares y terrazas, o tomando el sol en las playas cercanas. La naturaleza ofrece por su parte hermosos enclaves cercanos, como las Marismas de Odiel, situadas en el estuario del río del mismo nombre (Huelva está situada entre los ríos Tinto y Odiel) y que están consideradas como uno de los humedales más importantes de Europa. Museos arqueológicos llenos de historia, paseos bajo la puesta de sol, casas centenarias, iglesias llenas de encanto y hermosos parques son sólo una muestra de la amplia oferta cultural y turística de la ciudad de Huelva.
Un casco antiguo reconstruido como centro de múltiples opciones
En el apartado de construcciones religiosas, Huelva no se queda atrás. Probablemente la representación más conocida e interesante de este tipo de arquitectura sea la Catedral de la Merced, erigida en el siglo XVII y de estilo de transición entre el Renacimiento y el Barroco. La Catedral está situada en la plaza que lleva su mismo nombre, y junto a ella se ubica la actual Universidad de Huelva, con sede en el antiguo Convento de la Merced. Otra iglesia que merece la pena visitar es la Iglesia Parroquial de San Pedro, de estilo mudéjar y construida en el siglo XV; y por supuesto, la Iglesia de la Concepción (s. XVI) y la Ermita de la Soledad (S. XVII) también son dignas de consideración. Y no podemos terminar un recorrido por la arquitectura religiosa de Huelva sin mencionar el Santuario de Nuestra Señora de la Cinta, donde Cristóbal Colón rezó tras su primer viaje para agradecer el éxito de la expedición. Desde este Santuario es posible contemplar bellas puestas de sol.
Si lo que buscamos son largos paseos a lo largo de la costa, al atardecer, lo mejor es que nos dirijamos a los Muelles de Tinto y de Tharsis, antiguos muelles erigidos por los británicos para cargar y transportar mineral desde localidades como Andévalo, y embarcarlo hacia el Reino Unido. Y si lo que queremos es disfrutar de la playa, Huelva cuenta con una excelente: la Playa del Espigón. Se trata de un tranquilo y poco concurrido arenal de tres kilómetros de longitud, y merece la pena visitarla tan sólo porque forma parte del Parque Natural de las Marismas del Odiel, que hay que atravesar para llegar a la playa. Los amantes del nudismo y de la tranquilidad encontrarán en la Playa del Espigón su particular paraíso. Y aprovechando la visita, no podemos dejar de admirar las Marismas del Odiel; calificadas como Reserva de la Biosfera, siguen en importancia al Parque Natural de Doñana y contienen dos reservas naturales. Hay rutas organizadas en minibús, a pie, interpretativas, en tren neumático y en barco para los viajeros que quieran conocer a fondo todos sus secretos.
Mariscos, jamón de primera y tesoros del mar y la tierra
Los embutidos (chacinas en Andalucía) son un capítulo aparte en Huelva, sobre todo si hablamos del rey indiscutible de las mesas: el jamón ibérico. Elaborado a partir de cerdos de pata negra que viven en libertad en las dehesas, alimentándose de bellota, su sabor, color, aspecto y textura lo han convertido en un manjar apreciado en todas las mesas del mundo, y único en su género. Además del delicioso jamón, en Huelva es también posible degustar caña de lomo de excelente calidad, chorizo, salchichones y muy especialmente las típicas morcillas de la región. Las morcillas son un ingrediente fundamental para los potajes y ollas que se elaboran en hogares y restaurantes, a base de legumbres. Entre otros destacan las habas enzapatás, el potaje de vigilia, los garbanzos con espinacas y muchas otras delicias de puchero. Las verduras y el aceite de oliva de altísima calidad de la región hacen posible la elaboración de platos como los gazpachos y salmorejos; además de excelentes productos de la huerta, también es posible degustar estupendas setas de temporada, entre las que destacan los típicos gurumelos. La carne y la caza también tienen una importante presencia en las mesas de Huelva, siendo los protagonistas de excepción el cordero y el cerdo.
La repostería onubense, al igual que la del resto de Andalucía y de gran parte de España, tiene una fuerte influencia árabe, lo que se nota en el empleo habitual de frutos secos y miel en la elaboración de los dulces. Las cocas son tradicionales en muchas localidades de la provincia, como Lepe o Ayamonte entre otras, y en otros puntos se elaboran delicias como los roscos de nueces, las tortas de Pascua o el mazapán de castañas. Todas las especialidades pueden encontrarse en las pastelerías y los obradores de Huelva capital. Para terminar, señalar que en la provincia de Huelva se elaboran excelentes vinos blancos y licores de la mejor calidad.
Carnavales y fiestas colombinas, ferias y tradiciones
Huelva comienza pronto a despertar a la diversión callejera; tan pronto, que es el día 20 de enero cuando se celebran las fiestas patronales de la ciudad, con motivo del día de San Sebastián y que están declaradas Fiestas de Interés Turístico Nacional. Tendrá que transcurrir alrededor de un mes para que lleguen unas celebraciones esperadas por todos los onubenses: los Carnavales Colombinos. Después del Carnaval de Cádiz se trata del segundo en importancia de la comunidad andaluza, y su evento central es el Concurso de Agrupaciones, que llega a reunir a más de setenta asociaciones en el Gran Teatro de la ciudad. Unas semanas después, ya en primavera, llega la Semana Santa para aportar recogimiento y espiritualidad a la ciudad. La celebración está considerada una de las más espectaculares de España, con múltiples procesiones a cargo de las distintas hermandades y cofradías, que portan impresionantes pasos e imágenes entre el sobrecogedor silencio de los asistentes. La Romería del Rocío también tiene importancia en Huelva capital, de donde salen muchos asistentes para unirse a la comitiva que llegará a Almonte.
La primavera se celebra por todo lo alto en Huelva durante las populares Cruces de Mayo, una festividad típicamente andaluza en la que los protagonistas son los patios de las casas particulares, que se engalanan con flores para participar de la celebración. Son días de alegría y luz en la ciudad, que continúan ya en verano con las Fiestas Colombinas (en agosto). Aunque no son las fiestas patronales propiamente dichas de la ciudad, sí son las más importantes y festejadas por las calles. Se cree que su origen se remonta al primer viaje de Cristóbal Colón, como conmemoración de su partida. Las fiestas tienen su centro neurálgico en el Recinto Colombino, un lugar que se puebla de las típicas casetas andaluzas, como cualquier feria que se precie. Los trajes tradicionales, la música, los bailes y la alegría en general se extienden hasta la madrugada durante los días festivos, en los cuales también es posible asistir a importantes corridas de toros.
En Huelva también se celebran gran cantidad de ferias, bien sea de tipo gastronómico y que se extienden a lo largo del año, bien artísticas (con especial referencia a la música y el cante flamenco) y muchas exposiciones y eventos culturales. Un motivo más para visitar esta maravillosa ciudad y disfrutar de sus gentes, su alegría, sus paisajes y su especial idiosincrasia.
