El indiscutible encanto de un pueblo de pescadores
Tan hermosa como especial y pintoresca
Garrucha es de los pocos enclaves que quedan en nuestras costas donde el encanto de las tradiciones ligadas al mar se mantiene vigente. Este precioso pueblo de pescadores vive dedicado fundamentalmente a la pesca, aunque en las últimas décadas la actividad turística se ha incrementado, de manera que ambas coexisten a la par. Garrucha pertenece a la provincia de Almería, y actualmente cuenta con alrededor de 8.000 habitantes. Se puede decir sin temor a equivocarse que se trata de lugar íntimamente ligado al mar; y buena prueba de ello son los tres puertos con los que cuenta, así como la presencia del precioso paseo marítimo que permite a los viandantes disfrutar de las vistas sobre el Mediterráneo en su caminar.
A Garrucha se la conoce ya desde el siglo XVIII como "la pequeña San Sebastián", debido a su gran interés turístico y también a su pintoresca estampa marina y pesquera. Pero las mansiones señoriales que la pueblan también tienen mucho que ver con esta denominación, al igual que su hermosa playa o su casco histórico. Aunque la verdadera joya de la localidad, que sus habitantes muestran orgullosos, es su esplendido paseo marítimo. Su longitud lo convierte en un enorme mirador sobre la playa de Garrucha; además, al construirlo se encontraron en las obras restos arqueológicos de gran valor, que demuestran que se trata de un pueblo de la época de la cultura argárica.
La Playa de Garrucha o de las Escobetas es uno de los motivos por los que, año tras año, viajeros de toda España y otros destinos internacionales acuden a Garrucha a pasar sus vacaciones. Pero la playa, a pesar de ser un estupendo atractivo, es solo una de las muchas razones por las que acudir a esta bella localidad. Sus lonjas de pescado, que subastan las capturas al atardecer; los restaurantes y bares que ofrecen lo mejor del mar, sobre todo la renombrada gamba roja de Garrucha; el precioso Castillo del siglo XVIII y los puertos (deportivo y pesquero) de la localidad, hacen que sea uno de los destinos de la costa mediterránea con mayor oferta turística en todos los sentidos.
Playa y lonja de pesca junto al Paseo y al Casco Antiguo
La playa de la Garrucha, como ya hemos indicado, también es conocida como la Playa de las Escobetas, y es el único arenal con que cuenta el municipio. El Paseo Marítimo recorre la playa de punta a punta, y además se ve flanqueada por sus tres puertos el comercial, el deportivo y el pesquero. Se trata de una playa muy cuidada, que cuenta con todos los servicios necesarios y, además, ostenta la codiciada Bandera Azul de la CEE que da fe de la calidad de sus aguas, su limpieza y sus equipamientos.
Cuando hablamos de Garrucha, debemos detenernos un rato en su magnifico Paseo Marítimo, mas conocido como el Malecón. Su longitud es de casi dos kilómetros, y es de una belleza casi caribeña que se debe en gran parte a la profusión de palmeras que lo flanquean, pero también a las zonas de parques y a la espectacular barandilla de mármol que lo remata. Precisamente en una de dichas zonas ajardinadas se encuentra el Monumento al Pescador, uno de los "iconos" de la localidad que rinde sentido homenaje a los pescadores que fundaron la población, y que desde siempre la han aportado vida y riqueza. Los puertos de Garrucha también se encuentran próximos al paseo; darse una buena caminata disfrutando de las vistas y llegar al atardecer a la lonja, próxima al puerto pesquero, para asistir a la Subasta del Pescado del Día, es algo que ningún visitante que llegue a la localidad debe dejar de hacer. El Puerto Deportivo también es un hermoso lugar; sus doscientos amarres posibilitan la contemplación de bellas embarcaciones de todo tipo.Y para terminar el día, nada mejor que acudir a alguno de los muchos restaurantes de la zona y disfrutar en persona de esas delicias, en forma de pescados y mariscos frescos, por las que la localidad de Garrucha es justamente famosa.
El patrimonio histórico también es uno de los puntos fuertes de la zona. Su construcción mas característica es el Castillo de Jesús Nazareno, que también recibe los nombres de Castillo de Escobetas o de San Ramón. Su construcción se remonta al siglo XVIII y su responsable fue el arquitecto Francisco Ruiz Garrido, que lo erigió para defender a la ciudad de los ataques de los piratas del Mediterráneo. Es, pues, todo un castillo de leyenda y con grandes aventuras a sus espaldas; su ubicación en la misma Playa de Garrucha, y su imponente silueta militar (en la que destaca su plaza de armas y sus dos torres) lo convierten en un edificio magnifico.
El Casco Antiguo de Garrucha es un lugar perfecto para callejear, comer unas tapas, hacer unas compras o simplemente, contemplar los bellos edificios que lo conforman. Un buen ejemplo es el propio Ayuntamiento de Garrucha, con su decorativa fachada en tonos ocre y un reloj de buen tamaño en su parte superior. La Iglesia Parroquial de San Joaquín es otra de las joyas arquitectónicas de la ciudad; se erigió como tal en el siglo XIX y esta situada muy próxima al Ayuntamiento. La imagen de San Joaquín, patrón de la localidad, es muy venerada en la villa y esta albergada en dicha iglesia. En cuanto a edificaciones civiles, Garrucha es conocida por las preciosas casas señoriales que ostenta; un buen ejemplo es la llamada Casa de la Marina de la Torre, del siglo XX y en estilo neomudéjar, todo un palacio de lo mas espectacular.
Para terminar el recorrido, los amantes del arte y el entorno natural podrán disfrutar también de edificios como la Torre de la Fundición de San Jacinto, esta vez ya fuera del recinto urbano. Esta edificación se encuentra en la cima de una colina; el paseo merece la pena, ya que el caminante se vera recompensado con unas increíbles vistas sobre la ciudad y el litoral costero.
Pescado fresco y gamba roja, los tesoros mas apreciados del Mediterráneo
La demostración de la cultura popular y tradicional que es la gastronomía se ve perfectamente reflejada en la cocina típica de la Garrucha. Como enclave pesquero que es desde hace ya milenios, no cabe duda de que los mariscos y pescados frescos son las joyas mejor guardadas de la gastronomía de esta localidad almeriense. Se trata de una cocina muy sencilla, basada fundamentalmente en la calidad y excelencia de los productos del mar, pero también de la tierra; siempre prestando especial cuidado en escoger alimentos de temporada y productos autóctonos.
No se puede hablar de gastronomía en Garrucha sin hacer especial énfasis en la deliciosa gamba roja, de popularidad internacional. Esta especie esta considerada uno de los mariscos mas deliciosos de todo el Mediterráneo; su zona de cría y de pesca es muy reducida, y se circunscribe únicamente a la franja de litoral que da a Garrucha. Esta escasez, aparte de su maravilloso sabor, es lo que hace que la gamba roja alcance precios muy altos en el mercado. La gamba roja de Garrucha puede consumirse en muchos buenos restaurantes de nuestro país, pero sobre todo la podemos encontrar en los establecimientos de la localidad, que la sirven a la plancha, recién preparada. Más grande y de color más intenso que las variedades de gamba común, su deliciosa carne es característica y merece la pena hacer un exceso por una vez para probarla, sobre todo si es en un típico restaurante con vistas al mar.
Siguiendo con los tesoros llegados del mar, el pescado ocupa también un merecido lugar en las mesas de Garrucha. Las especies que se capturan, venden y degustan son muchas, todas ellas igualmente exquisitas: pargo, gallopedro, sargo, lenguado, gallineta, mero... El listado es impresionante. Por lo general, se preparan enteros, a la sal o a la plancha, y a veces con aceite de oliva y vino blanco; pero también son ingredientes característicos de algunos platos tradicionales de la zona, como la antológica zarzuela de pescados y mariscos (típica del Levante almeriense y un plato clásico marinero) o el guiso marinero, que se prepara con caballa, emperador o rape aliñados con almendras, ajos y pan.
Otros platos típicos de Garrucha, que comparte con otras zonas de la misma Almería, son las populares migas (de harina o de pan, acompañadas con pimientos verdes fritos y sardinas, boquerones o tocino) y el arroz con conejo. El arroz a la garruchera, a banda o el pimentón con "chupaeros" y tortas de avio son guisos que continúan con la tradición marinera de la región. Por su parte, la clásica cuajadera de Garrucha es también un plato muy presente en mesas de casas y restaurantes; se prepara con jibia, patatas, vino blanco, azafrán y pimienta, y constituye un guiso muy contundente, pleno de sabor. Y para rematar el menú, los guisos con ingredientes de la tierra también son reseñables, como los gurullos con caracoles o la cazuela con pimientos coloraos y costillas.
Tradiciones religiosas y paganas, y mucha diversión
Las festividades mas renombradas de Garrucha, al igual que ocurre en otros puntos de Andalucía, son típicamente religiosas; eso si, a las celebraciones puramente espirituales, a las que el pueblo se entrega con pasión, se les une la diversión característica de las ferias. Aunque las fiestas religiosas son las más populares, en Garrucha también hay festividades paganas. La más popular, que no solo se celebra en la localidad sino también en el resto de la comarca del Levante almeriense, es el llamado "Día de la Vieja", que tiene lugar el 2 de febrero. Se trata de una festividad pagana, y su celebración coincide con los días medios de la Cuaresma. La fiesta comienza por la mañana; los habitantes de las distintas localidades se encaminan al campo a pasar la jornada, convirtiendo el día en una romería clásica en compañía de familiares y amigos, con la intención de "partir la vieja". Después de comer, y al tiempo que se consumen los postres, es el momento para que los niños pongan de pie una especie de piñatas llamadas "viejas". Al término de la clásica canción, los niños tiran piedras a las "viejas" para romperlas y dejar salir una autentica riada de chucherías, con lo cual se da por finalizada la celebración.
La Semana Santa es, como mandan los cánones, momento de espiritualidad y recogimiento en Garrucha. En la localidad existen distintas hermandades que sacan en procesión a los pasos, recorriendo las calles entre el fervor de los asistentes. Las Cruces de Mayo, que se celebran en toda Andalucía a finales de abril y principios de mayo, también tienen su especial celebración en Garrucha.
Como localidad costera y tradicionalmente marinera, en Garrucha hay dos festividades muy especiales durante el verano: las clásicas Hogueras de San Juan, el 23 de junio por la noche, y la Virgen del Carmen, el 16 de julio. En San Juan, la playa se puebla con hogueras y los asistentes disfrutan de comidas nocturnas y baños a la luz de la luna; además, se celebra la tradicional "quemá del barco que se jubila". Por su parte, en el día de la Virgen del Carmen, Patrona de los marineros, se destaca como evento importante la Procesión Marinera de la Virgen, una romería que transcurre por mar en la que los barcos se adornan profusamente y es fundamental la participación de todo el pueblo.
El ambiente turístico y animado de Garrucha hace que sus noches sean muy especiales. Acompañadas del clima templado de la zona, con el brillo del mar bajo la luna y gran cantidad de chiringuitos y locales con terrazas al aire libre, las noches de Garrucha tienen muchos admiradores que las disfrutan año tras año, sobre todo durante el verano. Un lugar mágico, donde pasar inolvidables momentos junto al mar.