Otro de los eventos más importantes que tendrán lugar en Italia en los próximos años son las Olimpiadas de Invierno de 2026, que se celebrarán en Milán y Cortina d’Ampezzo.

Cortina d’Ampezzo está situada en el corazón de los Dolomitas, en una amplia cuenca rodeada por altas montañas, y es el destino por excelencia de los amantes de los deportes de nieve, ya que está incluida en el circuito Dolomiti Supersky, formado por 1.200 km de esquí.

En esta zona se encuentran los picos monumentales más bellos del mundo, como el Cristallo, el Tofane, las Cinque Torri, el Pomagagnon, el Becco di Mezzodì… Pero además de la nieve en temporada invernal, hay muchas otras actividades que se pueden practicar entre montañas: equitación, ciclismo, montañismo, escalada, rafting, kayak y canoa.

Venecia es uno de esos lugares al que todo el mundo debería viajar, al menos, una vez en la vida. Tiene un encanto muy especial que le aportan sus canales y sus bellos edificios y monumentos, como la magnífica plaza de San Marcos, con la Basílica de San Marcos, el Museo Correr y el Palacio Ducal, entre otros. Destaca muy especialmente la Basílica de San Marcos por ser el monumento religioso más grande e importante. Su construcción comenzó en el siglo XIX para alojar el cuerpo de San Marcos, que iba a ser traído desde Alejandría. Sus 4.000 metros cuadrados están repletos de mosaicos del siglo XIII y 500 impresionantes columnas. Debido a la riqueza arquitectónica y ornamental de la basílica, es conveniente visitarla con un guía, que nos pueda explicar bien la importancia de cada cosa.

Según la tradición, el día 25 de marzo del año 421 es el que se reconoce más comúnmente como el día de la fundación de Venecia. Por tanto, este 2021 se celebran los 1.600 años de la ciudad, con un programa de eventos y espectáculos muy completo, promovido por las autoridades locales, tales como exposiciones, visitas a museos y a otros puntos de la ciudad; conferencias y seminarios.

La ciudad de Parma, en la región de Emilia-Romaña, fue elegida Capital Italiana de la Cultura para el año 2020, pero, tras la emergencia de la COVID-19, se ha ampliado su nominación a 2021.

Con una posición estratégica en el centro del valle del Po, cuenta con una historia muy interesante, protagonizada por mercaderes que la recorrían durante la época romana; excelentes sabores, auténticas joyas arquitectónicas, museos de lo más variopintos y, sobre todo, una alegre tradición artística y cultural.

Los llamados “distritos socioculturales” conforman el proyecto “Parma 2020+21” y se trata de lugares diseñados para difundir y compartir la cultura, a través de tradiciones, experimentos, conceptos innovadores y creatividad.

Estos lugares están posicionados en sitios estratégicos de la ciudad y cada uno de ellos está dedicado a una temática: arte audiovisual, música, diseño creativo, regeneración urbana, agroalimentación, educación…

Si tienes previsto viajar este año a Parma, no olvides echar un vistazo a su completa agenda de eventos para no perder detalle de las interesantes exposiciones, conferencias, charlas, debates, proyecciones documentales, conciertos… que se celebrarán a lo largo del 2021.

En 2021 se cumplen 700 años de la muerte del gran poeta italiano Dante Alighieri, autor del famoso poema La Divina Comedia. Para conmemorar su figura y obra, Italia ha organizado numerosos eventos y actividades, así como una ruta dividida en 20 etapas llamada “Los caminos de Dante”, que sorprenderá a todo tipo de viajeros.

Se trata de un itinerario de 395 kilómetros que va desde la casa natal de Dante, en Florencia, hasta su tumba en Rávena, pasando por los Montes Apeninos, silenciosos bosques, cascadas, históricos pueblos y castillos medievales. Por tanto, no es solo una ruta de senderismo, sino también cultural, artística, filosófica y espiritual.

La Divina Comedia tiene mucho que ver con esta iniciativa, ya que surgió en esta dimensión, repleta de personajes, fauna, castillos, paisajes y la duda que se plantea el hombre cuando realiza un viaje en relación con su propio ser. Durante esta experiencia, la sencillez y la hospitalidad serán tus fieles acompañantes, ya que la riqueza en este caso está en los aspectos cultural y humano de las zonas que se visitan.

Debido a esta situación que estamos viviendo a nivel mundial, es necesario realizar la reserva con dos/tres semanas de antelación; dos meses si tienes previsto realizarla en julio o agosto, ya que las plazas son muy limitadas. Tan grande es su interés que Lonely Planet ha incluido el recorrido en sus Best in Travel 2021 como la mejor “Ruta cultural” entre las experiencias de turismo sostenible reconocidas por la editorial.

Para el año 2022, la Capital Italiana de la Cultura elegida es Procida, la isla más pequeña del archipiélago de Campania, en el Golfo de Nápoles. De origen volcánico, está considerada un auténtico paraíso para unos días de vacaciones.

El mar es uno de sus principales atractivos, con las playas del Pozzo Vecchio y la de la Chiaiolella como protagonistas; sin olvidarnos de los bellos edificios de su casco histórico, procedentes de épocas pasadas. Destaca la Abadía de San Miguel Arcángel, en el promontorio de Tierra Murata, sobre el mar.

Se trata de la primera vez que un pueblo recibe la nominación de Capital Italiana de la Cultura, imponiéndose sobre otras ciudades más grandes que también presentaron la candidatura. Esto se debe a que Procida es un lugar para la investigación, experimento y conocimiento de la cultura, promoviendo el dinamismo relacional, la inclusión y el cuidado del patrimonio.

Si 2022 es el año en el que visitarás Procida, ¡mantente muy atento a su programación de eventos! 😉

Cerca de la ciudad de Andria, sobre una colina en las Murge, el Castel del Monte constituye una auténtica obra maestra medieval construida en el siglo XIII por Frederick II de Hohenstaufen. En 1996 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO debido a su espectacular arquitectura, con formas perfectas y fusión de elementos de diferentes épocas. El número ocho es el gran protagonista en el castillo: con plata octagonal; ocho habitaciones en la planta baja y en el primero piso, dispuestas en octágono; y ocho enormes torres.

Los “trullos” o “trulli” de Alberobello son conocidos por su peculiar belleza y representan un símbolo de la arquitectura tradicional de Italia. Estas edificaciones surgieron en una época en la que no era posible construir hogares estables, pero los habitantes de la zona demostraron una gran capacidad para erigir casas con la piedra pobre de esta tierra. Se pueden encontrar distribuidas por el sureste de las Murge y por el Valle de Itria, distinguiéndose por sus paredes blancas y techos en forma de cono. Gracias al proceso de transformación y recuperación centrado en el respeto a la originalidad, la UNESCO les otorgó el título de Patrimonio Mundial de la Humanidad en 1996.

El complejo nurágico de Barumini es un importante centro arqueológico y el mejor preservado de esta civilización prehistórica, que se encuentra en Marmilla (provincia de Medio Campidiano), al sur de la isla de Cerdeña. Fue reconocido en 1997 como uno de los lugares Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Según los restos hallados, la sociedad nurágica del Valle de Barumini vivió desde la Edad de Bronce hasta el siglo III a.C., durante unos mil años. Esta población está presidida por el Nuraghe central, que es la edificación megalítica típica de Cerdeña, también llamadas “Su Nuraxi”, que consistían en su mayoría en torres defensivas. Algunos estudiosos discrepan del uso militar de estas fortalezas, y consideran que es más apropiado pensar en su uso como centro de enterramiento. Dicho Nuraghe central tiene una altura de 15 metros y las dos plantas interiores están conservadas de forma intacta. La ciudad creció a su alrededor, con viviendas de planta circular, utilizadas para la vida doméstica de las familias. La muralla protectora de la ciudad data de la Edad de Hierro (entre el siglo IV y el XIII a.C.).

La experiencia desde el punto de vista del visitante es inolvidable, ya que no solo se ven un conjunto de piedras que, sin explicación, carecerían de sentido, sino que se pasea propiamente por una ciudad antiquísima que parece que ha quedado estancada en el tiempo. Además de poderte adentrar en el “Su Nuraxi” central, podrás caminar entre las calles y fantasear sobre cómo debió ser la vida de sus pobladores. Otras evidencias encontradas en los alrededores ofrecen pruebas de cómo eran sus hábitos, costumbres y creencias. Sobre la civilización nurágica se sabe que fueron gentes tranquilas, dedicadas al pastoreo, y con sólidas poblaciones en Cerdeña que sobrevivieron durante casi un milenio. Se calcula que unas 7.000 personas pertenecieron a esta sólida civilización que, hasta hoy, ofrece más preguntas que respuestas.

Los Saboya construyeron diversas residencias con un gusto exquisito por la ciudad de Turín y la provincia, la norteña región del Piamonte. Ya en el siglo XVI, dicha familia real comenzó a encargar la remodelación y restauración de castillos antiguos (incluso algunos que datan de la época del Imperio Romano), así como la construcción de nuevos edificios y residencias. En el año 1997 la Unesco añadió todas ellas al listado del Patrimonio de la Humanidad, ya que su belleza y el eclecticismo de estilos, entre barroco piamontés y manierista, son auténticas joyas arquitectónicas.

En total, hasta 22 castillos, palacios, villas y edificios anexos forman parte de esta deslumbrante colección, de las que 13 se encuentran en la ciudad de Turín. Entre los más conocidos y céntricos, encontraremos:

- El Palazzo Reale está ubicado en la Plaza del Castillo (Piazza Castello), pleno corazón de la ciudad, y fue la primera y más importante de todas las consideradas como “residencias reales de los Saboya”.

- El Teatro Regio, también en la Piazza Castello. Actualmente, sigue funcionando como teatro con un amplio programa de actividades entre octubre y junio.

- La Armería Real, ubicada en la cara norte de la Plaza del Castillo, acoge una extensa colección de armas, que incluye algunos ejemplares de los siglos XVI y XVII.

- La Biblioteca Real, es uno de los museos más relevantes de Turín. acogiendo gran parte de las colecciones saboyanas, entre las que se encuentra el importantísimo “Autorretrato de Leonardo Da Vinci” y otros 13 dibujos del artista. Las obras de Da Vinci se encuentran en un bunker en el sótano, a prueba de desastres y bombardeos.

En la Bahía de Nápoles, donde se encuentra la ciudad del mismo nombre, encontramos uno de los principales tesoros arqueológicos de Italia y, sin duda, uno de los mejor preservados: la ciudad de Pompeya. La virulenta explosión volcánica del Vesubio en el año 79 paralizó la vida de sus habitantes, de sus historias, pasiones y proyectos. Convertida en uno de los destinos turísticos más importantes de Italia, Pompeya fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1997.

La ciudad de Pompeya parce remontarse al siglo VII a.C y, según los estudios, fue un punto importante en las rutas comerciales por vía marítima del antiguo Imperio Romano. La erupción que destruyó la ciudad generó un trágico episodio que ha quedado inmortalizado para siempre, ya que las cenizas volcánicas cubrieron la ciudad, calcinando las vidas de los que allí se encontraban y petrificando sus cuerpos en las posiciones y actitudes que tenían en los segundos anteriores al drama. Se sabe de la fecha exacta de la erupción, ya que Plinio el Joven elaboró un relato para este dramático acontecimiento de la historia italiana.

Florencia, capital de la Toscana italiana, ofrece cultura, tradición, arte e historia. Su patrimonio histórico y artístico sigue sorprendiendo cada día a millones de visitantes de todo el mundo. Su casco histórico es un libro de historia y de arte; cada paso, cada metro cuadrado nos habla de personajes legendarios, de otros tiempos, otras civilizaciones, otros pueblos, creencias y formas de entender la vida. Por eso, el casco antiguo florentino forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Cuna de artistas de los cuales seguimos aprendiendo y dejándonos fascinar hasta hoy, como Petrarca, Miguel Ángel, Dante, Leonardo Da Vinci, Lorenzo de Medici, Maquiavelo o Brunelleschi, la historia de Florencia puede ser elaborada a partir de los grandes artistas y pensadores que han ido cincelando sus calles y plazas.

Su casco antiguo alberga muchas de las maravillas que Florencia guarda para deslumbrar al visitante: su Duomo (catedral) y su cúpula de Brunelleschi, el Baptisterio de San Juan y su “Puerta del paraíso” de Miguel Ángel, la Plaza de la Señoría y su espectacular estatua de David de Miguel Ángel, el puente Vecchio y el Palazzo del mismo nombre, la Galería de los Uffizi (considerado como el museo de arte más antiguo de Europa), Santa María Novella y el revolucionario crucifijo obra de Giotto, entre muchas otras obras maestras de la arquitectura, la escultura, pintura, literatura, etc.

La laguna de Venecia, ubicada al norte del bellísimo mar Adriático, riega la histórica y monumental ciudad de Venecia. Por decirlo de algún modo, Venecia está en el interior de la propia laguna, a unos 4 kilómetros de tierra firme y a unos 2 del mar abierto. La hermosa capital de la región de Véneto reta los principios de ingeniería y arquitectura, expandiéndose sobre 118 minúsculos islotes, que se separan por 160 canales, y unidos a su vez por más de 400 hermosos y misteriosos puentes. En el año 1987, la Unesco decidió incorporar la laguna de Venecia en su listado de Patrimonio de la Humanidad. Originalmente, gran parte de los islotes que hoy conforman Venecia eran áreas pantanosas inhabitables. Sin embargo, las tareas de drenado las ha convertido en testigo de muchas aventuras de la historia. Así que se puede decir que Venecia es una amalgama de islotes artificiales y otros drenados y saneados.

Las incontrolables lluvias de 1966 llevaron a la ciudad a una situación crítica y, desde entonces, la laguna y su cuidado han formado parte de las prioridades nacionales y regionales. El sistema MOSE es una obra de ingeniería civil, referente a nivel internacional, que busca garantizar la supervivencia e integridad de la ciudad y su laguna, limitando en la medida de lo posible la subida del nivel del mar Adriático. Este proyecto se inició en 2004 y se dio por finalizado 9 años después, tras la construcción de 78 compuertas basculantes. Se considera una obra titánica, que nos permitirá seguir disfrutando de la laguna de Venecia y las maravillas que esta acoge durante muchos siglos más.

Es una de las cuatro basílicas patriarcales católicas, consideradas mayores, junto con San Pedro, Santa Maria la Mayor y San Juan de Letrán. Es una de las cinco iglesias más antiguas de Roma, considerando todas las anteriores y San Lorenzo Extramuros. En cuanto a tamaño, es la segunda mayor, después de San Pedro y, según la tradición, es el lugar donde fue enterrado el aposto San Pablo. La Basílica San Pablo Extramuros es de estilo paleocristiano y, desde el año 1990, está incluida dentro del listado del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Con el paso de los siglos, una discreta capilla inicial, ha ido dando paso a diferentes edificios, cada cual más grande que el anterior. Los emperadores Teodosio, Graciano y Valentiniano II, que reinaron en conjunto en un determinado momento de finales del siglo IV decidieron edificar la primera basílica de este enclave. Este edificio se mantuvo en pie hasta el destructivo incendio de 1823, del que sólo quedó incólume el claustro. De esta manera, este edificio mantuvo viva la fe de muchos fieles y peregrino durante sus 1435 años de historia.

El papa León XII estuvo al frente de su reconstrucción, manteniendo el estilo paleocristiano del monumento primitivo. Este proyecto consiguió sacarse adelante gracias a las donaciones de grandes personajes de todo el mundo, como del Virrey de Egipto o el Emperador ruso. El resultado de la reconstrucción es que, aunque se han guardado gran parte de las estructuras básicas y el estilo general, el edificio actual dista mucho del original. Sin embargo, esta maravilla colosal de la arquitectura, con sus 131 metros de largo, 65 de ancho y 29 de alto, sigue atrayendo visitantes de medio mundo.

En pleno corazón de la Lombardía italiana, está la espectacular ciudad de Milán, una mezcla explosiva de arte, cultura y tendencia sin igual en el país. Entre sus monumentos más reconocidos esta la Iglesia y convento dominico de Santa Maria della Grazie, declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO en 1980. Su fachada, elementos arquitectónicos y ornamentales, y la magnificencia de la estructura en general suponen un rico testimonio del Renacimiento milanés. El edificio comenzó a construirse en el año 1463 y se dio por terminado en el 1490. Se ha sometido a 4 restauraciones a lo largo del siglo XX, como consecuencia de los efectos destructivos de los bombardeos. La última restauración concluyo en 1999.

La ubicación de este reputadísimo monumento está en pleno centro de Milán, en la Piazza Santa Maria delle Grazie. Cuando se planifico la construcción de la iglesia, Ludovico il Moro quiso que este fuese el lugar de enterramiento para los miembros de la familia Sforza. En 1497, su esposa Beatrice d’Este fue, precisamente, enterrada aquí. Según cuenta la tradición, se construyó un túnel que comunica directamente la iglesia con el castillo, llamado “Sforzesco al convento”. El edificio se comenzo a edificar en paralelo con el convento adyacente, que forma parte del complejo.

A pesar del indudable valor arquitectónico de la iglesia y convento, su fama internacional ha venido indudablemente unida a la joya artística: “La Ultima Cena”, de Leonardo da Vinci. Esta obra se encuentra sobre la pared donde se elaboró originalmente, el refectorio del convento y fue encargo de Ludovico Sforza. Contrario a la creencia popular, no es un fresco tradicional, sino un mural al óleo y tempe. Tiene unas dimensiones de 4,6 metros de alto por 8,8 metros de ancho. Profesionales y aficionados consideran “La Ultima Cena”, como una de las obras pictóricas más perfectas de la historia.

Es importante tener en cuenta que, para entrar al convento y contemplar la obra de Da Vinci es indispensable reservar con mucha anticipación, ya que los cupos de visitas son limitados. La visita dura 10 minutos aproximadamente y no se permite tomar fotos ni videos. No te quedes sin ver esta obra maestra en persona, y reserva tu visita cuanto antes.

Los “Sassi” son antiguas edificaciones excavadas en la roca volcánica de la montaña de Matera, sobrepuestas entre sí, de forma que los tejados de unas sirven de suelos para otras, y unidas por pequeñas calles y largas escalinatas. Su atractivo es tan espectacular que en 1993 fue incluido en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO.

Matera bien merece una visita, no solo por admirar la belleza de los “Sassi”, sino también por conocer un lugar histórico que te transporta al pasado. Esta zona ya estaba habitada en el Paleolítico, cuando se establecieron los primeros asentamientos en las grutas de la montaña. Desde entonces, los habitantes fueron adaptando su vivienda al ecosistema y haciendo un uso responsable de los recursos naturales, que fue variando según la época: desde las viviendas subterráneas de sus orígenes hasta las estructuras urbanas construidas con materiales excavados. Te recomendamos visitar una de sus zonas más antiguas, el barrio Civita, donde se encuentra la bella catedral románica; y las dos hondonadas del Sasso Barisano y del Sasso Caveoso.

Paseando por sus calles te parecerá estar dentro de un pesebre. Y es que tan grande es su parecido, que la ciudad de Matera también es conocida como la “Segunda Belén”. A lo largo de los años, su peculiaridad ha atraído a escritores, artistas y directores de todas partes del mundo. Incluso en ella se han rodado escenas de importantes películas como La Pasión de Cristo de Mel Gibson.

Esta localidad de la provincia de Foggia bien merece ser visitada por su fuerte relación con la espiritualidad. En ella puedes seguir los pasos de San Pio de Pietrelcina, famoso por sus milagros, a través de diferentes lugares que nos conectan con su obra. El más importante de ellos es el convento capuchino de Santa Maria delle Grazie, donde vivió, dio sus últimas misas y murió en el año 1968. Tras su muerte, se construyó el Santuario Nuevo por obra del arquitecto Renzo Piano, inaugurándose el 1 de julio de 2004, 45 años después de la apertura de Santa Maria delle Grazie. Aquí es donde se encuentra la tumba del santo.

El archipiélago Tremiti es un regalo divino que bien puede considerarse el paraíso en la tierra. Está formado por las cinco islas de San Domino, San Nicola, Capraia, Cretaccio y Pianosa, donde historia y naturaleza se funden a la perfección para ofrecer un paisaje espectacular. Con el título de Reserva Marina, es el destino ideal para los apasionados del buceo, que pueden sumergirse para descubrir grutas, barrancos, paredes de gorgonáceas y los restos de la ruta marítima de comercio que pasaba por la zona. Prepara la cámara y no dejes de fotografiar los mejores atardeceres que verás jamás.

La provincia italiana también destaca por ser un buen destino para los viajeros interesados en la arqueología. Muy cerca de la ciudad de Matera se encuentra el Parque arqueológico histórico y natural de las Iglesias Rupestres de la zona de Matera, que alberga más de 160 iglesias rupestres, tres poblados de origen neolítico (Serra d’Alto, Timmari y Murgia Timone) y tumbas prehistóricas. El área arqueológica de Metaponto también es un lugar de imperdible visita, situado en la zona costera del mar Jónico, cuyo gran tesoro es el templo dórico-arcaico dedicado a Afrodita, que data del 470 a.C. ¡Muy atento a todos los detalles para descubrir su alucinante pasado!

Para respirar aire puro y desconectar al aire libre, qué mejor plan que visitar sus dos reservas naturales regionales: la Reserva regional de San Giuliano y la Reserva Natural Bosco Pantano de Policoro, perfectas para los auténticos aficionados a la ornitología por la gran variedad de especies de aves que habitan en ellas. También cabe destacar el Parque Natural de Gallipoli Cognato-Piccole Dolomiti Lucane, donde además de observar aves es posible encontrarse con la tortuga mediterránea, pequeña y con manchas amarillas en su caparazón. En todas estas zonas te recomendamos realizar alguna ruta de senderismo para sorprenderte con la espectacular naturaleza.

A escasos 3 kilómetros al sur de la localidad de Agrigento nos espera uno de los lugares arqueológicos más interesantes de Sicilia, las ruinas de la antigua ciudad de Akragas, entre los que destacan su espectacularmente bien conservado Templo de la Concordia. Las ruinas cubren un área de 1300 hectáreas y se divide en dos partes, la este y la oeste.

En la sección este encontrarás los 3 templos mejor preservados. El Tempio di Hera, del siglo V a.C. 3, el Tempio della Concordia, que permanece prácticamente intacto desde el 430 a.C.y el Tempio di Ercole, el más antiguo, datando del siglo VI a.C. De forma complementaria a estos tres templos principales, hay otros templos menores, como Tomba di Terone, del 75 a.C.

En la sección oeste del Valle de los Templos encontraremos las ruinas del Tempio di Giove, cubriendo un área de 112 metros de largo por 56 metros de ancho. Sus columnas, de corte dórico, se levantan 20 metros del suelo. Este templo sufrió el saqueo de los cartagineses, al igual que toda la ciudad de Akragas. En esta parte también encontraremos el Tempio dei Dioscuri, del siglo V a.C., que fue destruido por un terremoto y fue reconstruido en el siglo XIX. De forma complementaria, encontraremos el Santuario delle Divina Chtoniche, del siglo VI a.C. y el santuario de Giardino della Kolymbetra, con su vistoso jardín de olivos y limoneros. Con más de 300 especies de flora catalogada, es el lugar idóneo para disfrutar de un buen picnic y una deliciosa sombra.

También conocido como MANN, es uno de los museos arqueológicos más importantes de toda Europa, gracias a la extensísima colección de objetos históricos de gran relevancia. La construcción del edificio data del siglo XVI. Inicialmente, fue una caballeriza. Posteriormente pasó a ser el Palacio de los Estudios Reales (una de las sedes de la Universidad de Nápoles) y, por último, y por ordenanza de Fernando IV, el recinto re acondicionó para convertirse en el Museo y Biblioteca Real. Independientemente de su interior, el edificio supone en sí uno de los principales palacios monumentales de la ciudad, presidiendo la Plaza del Museo. Una vez dentro, y entra las diferentes colecciones expuestas, cabe destacar:

• La Colección Farnesio, con elementos de la antigua Roma.
• La Colección Pompeyana, con objetos procedentes de Pompeya, Estabia, Boscoreale, Herculano y otros sitios arqueológicos de la región del Vesubio.

Imagen por antonomasia de la ciudad, su Catedral se erige señorial y maravillosa, con su colosal cúpula y su campanario, presidiendo la Piazza adyacente. Su nombre completo es Santa María de las Flores y su construcción comenzó en el 1.296 y no se completó hasta 72 años después. Sus brutales dimensiones la han convertido en uno de los templos cristianos más grandes del mundo, con 160 metros de largo y 43 de anchos. La altura de la cúpula vista desde el interior es de nada menos que 100 metros (114 metros considerando su exterior). Cerca del acceso a la Catedral encontrarás la entrada a una cripta minúscula, donde yace el cuerpo del arquitecto florentino Brunelleschi, quien construyó la cúpula de la Catedral, en la que trabajó durante 14 años.

Giorgio Vasari y Federico Zuccari decoraron el interior de la cúpula, en la que se representan escenas del Juicio Final. Si estás en forma, puedes subir los 463 peldaños hasta lo alto de la cúpula para obtener unas vistas sobre Florencia absolutamente maravillosas. Es importante considerar que, debido a que la Catedral es un templo de devoción religioso, no se podrá acceder con indumentaria excesivamente corta o con transparencia. Cualquier prenda que cubre los hombros y los muslos será suficiente para evitar situaciones incómodas en la entrada.

Antiguamente llamado Anfiteatro de Flavio es considerado como el monumento del Imperio Romano más impresionante de Roma y el más grande de toda la historia del Imperio. Más de 6 millones de personas lo visitan habitualmente cada año. Hoy en día es un icono para la capital italiana, ya que nos da una idea de cómo era la vida y la sociedad de Roma hace 2.000 años.

Es un viaje apasionante en el tiempo que nos traslada al año 72, cuando Vespasiano ordenó la construcción del coliseo, obra culminada 8 años más tarde, bajo el mandato del emperador Tito. Dicho monumento alojaba originalmente más de 50.000 personas, que asistían enfervorizadas a los espectáculos que allí se organizaban: lucha de gladiadores, recreaciones de batallas, duelos entre animales o entre animales y humanos, ejecuciones públicas, etc. Sólo en los 100 días posteriores a su inauguración, 6.000 gladiadores y reos perdieron la vida.

El Coliseo permaneció vivo durante unos 500 años y los últimos juegos se organizaron en el siglo VI. Después de esta fecha, el Coliseo sufrió su decadencia, debido a terremotos y saqueos, y, más recientemente, en tiempos de la Segunda Guerra Mundial, bombardeos. Hoy por hoy, el Coliseo es uno de los principales atractivos de Roma y es considerado, desde el año 2007, como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.

La catedral de Milán está dedicada a Santa María de la Natividad (Santa Maria Nascente) y es la sede del Arzobispado de Milán. El monumento es de estilo gótico y requirió de seis siglos hasta completarse.

Es la iglesia más grande de Italia (ya que San Pedro está en el Estado de Vaticano) y es la tercera más grande del mundo. La nave central tiene una altitud de 45 metros y su azotea está abierta al público, la cual permite unas vistas privilegiadas de la ciudad de Milán. Los elementos arquitectónicos y decorativos de la catedral son tan sofisticados y ricos, que una visita sin guía nos dejará sin entender el verdadero valor del monumento más importante de este destino. Merece la pena incorporarse a una visita guiada, con la que aprendamos de sus orígenes, los elementos ornamentales, así como del papel que ha ido jugando a través de los siglos en Milán.

En pleno corazón del Golfo de Orosei, se encuentra una de las cuevas más magnéticas de la isla: la gruta del Bue Marino. No solo es espectacular por sus formaciones geológicas, que te harán adentrarte en una dimensión donde las estalactitas y estalagmitas dibujan un universo nuevo, sino que podrás pasear por un impresionante río subterráneo, gracias a una pasarela de madera para visitantes que se ha construido al efecto. Sin duda la visita al Bue Marino es absolutamente imperdible e inolvidable. En sus paredes, existen pinturas rupestres, que datan del neolítico, así como restos fósiles de distintos momentos históricos. A apenas un kilómetro del exterior, hay un hermoso lago salado con aguas brillantes, que te dejará deslumbrado. El acceso a la gruta es extremadamente escarpado. Por ello, la única manera de llegar es por mar.

En Cala Gonone, podrás coger un barco que, después de ofrecerte un paseo con unas vistas maravillosas de los acantilados de la zona, te permitirá acceder a Bue Marino. Tú sólo déjate llevar y disfruta de una excursión absolutamente maravillosa.

De los cuatro puentes que cruzan el Gran Canal de Venecia, el Puente Rialto es, sin duda, el más antiguo de todos ellos. Es conocido tanto por su exquisito diseño como por su historia, sino durante muchos años el centro económico de la ciudad. Su construcción data del siglo XVI, que sustituyó al sencillo puente de madera anterior, que se había derrumbado en varias ocasiones. Lo podrás cruzar a cualquier hora del día o de la noche y tratar de conseguir un buen punto desde donde sacar una foto del canal.

El Mercado Rialto está junto al propio puente y es precioso, el colorido de sus puestecitos de fruta y verdura, así como el aroma de los productos frescos que allí se venden harán que se te haga la boca agua. El mercado abre todos los días de 9 a 12 entre el Campo de la Pescadería y las calles cercanas. Existen referencias a un mercado así desde el año 1.097, bajo el nombre de “Rivoaltus” y las calles cercanas llevan los nombres de los gremios que antaño vivían y trabajaban en ellas.

El Museo Egipcio exhibe la colección más importante y destacada de objetos egipcios fuera de El Cairo. Dispone de grandes hallazgos, como la tumba del arquitecto Kha y la reconstrucción de una tumba del 2100 a.C.

Datos de interés
Dirección: Via Accademia delle Scienze, 6, 10123
Teléfono: +39 011 561 7776

Este pintoresco símbolo de Florencia es a la ciudad lo que el Coliseo es a Roma. Es una de las imágenes más representativas y conocidas, con su romanticismo indiscutible. Los orígenes del Ponte Vecchio (o puente viejo) se remontan a mediados del siglo XIV, lo cual lo convierten en el puente de piedra más antiguo de Europa. En los siglos posteriores, las casitas colgantes construidas encima del puente estuvieron habitadas por carniceros, pero Fernando I prohibió este gremio en el puente por el terrible mal olor que generaba.

Desde entonces hasta ahora, la mayoría de comercios que encontrarás en el Ponte Vecchio son de joyería y orfebrería. Afortunadamente, dicho puente fue el único puente de Florencia que no fue destruido por los bombardeos de la II Guerra Mundial. Si hay algo que caracterice hoy en día al puente es que las parejitas de enamorados suelen colocar un candado como demostración de amor. Cabe mencionar que, cada poco tiempo, las autoridades retiran los candados para garantizar la propia seguridad de la estructura, ya que millones de candados pueden suponer un incremento de peso para poner la integridad del puente en peligro. Durante la puesta de sol, es el lugar óptimo para relajarse, sentarse a tomar algo y disfrutar de los artistas callejeros que animan el puente con su arte y buen humor.

La Mole Antonelliana fue erigida como sinagoga a mediados del siglo XIX. Aquí encontrarás el Museo Nazionale del Cinema de Italia (Museo Nacional de Cine) y la torre, a la que podrás acceder en ascensor. La torre cuenta con un espectacular mirador que ofrece increíbles vistas panorámicas de la ciudad y de los Alpes.

Datos de interés
Dirección: Via Montebello, 20, 10124
Teléfono: +39 011 813 8560

Símbolo de Nápoles y punto de encuentro de miles de napolitanos y visitantes cada día, esta plaza se encuentra justo en frente del Palacio Real y es un lugar inmejorable para disfrutar de la auténtica vida de la ciudad, con sus incontables heladerías y su animada vida callejera.

Después de haberte refrescado a la sombra de alguno de sus árboles, puede continuar explorando la zona. Entre los principales destinos turístico que flanquean la plaza, además del Palacio, están la Basílica de San Francisco de Paula, el Palacio de la Prefactura y el Palacio Salerno. Si estas cansado de caminar, simplemente consigue un buen lugar para sentarte y observa el ir y venir de la gente. Si es posible, con un buen helado o con una taza de café italiano. 

¿Sabes que la tienes que incluir en tu lista de lugares a visitar y no sabes realmente porqué? Para empezar, es la fuente más bonita de Roma. Así, sin más. Sin discusión posible. Sus 20 metros de anchura y 26 de altura la convierten, además, en la más grande de la ciudad. Sus orígenes se remontan nada menos que al siglo XIX a.C. cuando la Fontana suponía el final del acueducto, Aqua Virgo. El Papa Nicolás V inició su construcción, durante el Renacimiento. Tras varios años de idas y venias en cuanto a su diseño, la obra se culminó en el año 1762 de la mano de Nicola Salvi y Giuseppe Pannini.

El mito de lanzar una moneda a la fuente tiene un origen muy poco místico, ya que fue la película de 1.954, “Tres monedas en la fuente”, la que hizo popular aquello de que, si lanzas una moneda, volverás a Roma; si arrojas dos, encontrarás el amor con un italiano o italiana; y si arrojas tres, te casarás con él o ella.

Si durante el día es sencillamente espectacular, por la noche, la fuente nunca está vacía, ya que la iluminación nocturna la convierte en un lugar, si cabe, aún más mágico.

Milán habla de estilo, de tendencia, de vanguardia, de elegancia, de modernidad. Mira al futuro con ganas de ir siempre unos pasos por delante. La tradición solo la utiliza si le puede dar un giro de tuerca encaminado a la innovación. Si estás buscando el plan perfecto para sentirte durante unas horas como un auténtico milanés, no deberías perderte una visita a esta galería comercial. Es mucho más que un simple centro comercial, ya que su estructura futurista de hierro y cristal te hará sentir como una celebrity transportada a otro tiempo. Esta galería es, para los que viajan con un presupuesto más ajustado, una excusa para curiosear los escaparates y, en días de mucho calor o de lluvia, caminar entre la Piazza del Duomo a la Piazza di Marino o al Teatro alla Scala a resguardo. Aunque no vayas a comprar nada, merece la pena una visita.

A veces Sicilia puede hacerte sentir que es algo totalmente distinto a la Italia continental y, otras veces, que es la Italia originaria, la que hace décadas debió existir en todo el país. Bueno, es la magia de la isla, su dualidad y su ambigüedad. Los griegos dejaron una huella imborrable en Sicilia y prueba de ello son los teatros griegos de Taormina y Siracusa.

En Taormina, con el Monte Etna como testigo de los vaivenes históricos, encontraremos un teatro griego entre el océano y el mar. Los habitantes de Sicilia del siglo III d.C. no pudieron encontrar mejor entorno para construir este teatro, que es el segundo más grande de la isla, después del de Siracusa, y el más espectacular en cuanto a ubicación. En verano, se sigue utilizando para alojar espectáculos de diversa índole. Para explorar este bellísimo escenario de la historia, y evitar las multitudes de las horas punta, es mejor acercarse prontito, en cuanto abran a las 9 de la mañana.

El Teatro Greco de Siracusa forma parte del sitio arqueológico Neapolis. El anfiteatro podía acomodar hasta 16,000 personas y acogió obras de Sófocles, Eurípides y Esquilo. Es una obra de arte de la arquitectura griega clásica y, hoy, un lugar de peregrinaje para entendidos y aficionados al arte griego clásico. Si no tienes muchos conocimientos en materia de arte y arquitectura griega, puedes unirte a una visita guiada, en donde aprenderás algunos datos importantes para entender la relevancia de este Teatro Greco de primer orden internacional.

Junto con Alghero y Cagliari, Sassari, al norte de la isla, es una de las poblaciones más importantes de Cerdeña. Ofrece historia, cultura y una amplia oferta gastronómica. La Costa Esmeralda y sus bellísimas playas está a poca distancia y ofrece la combinación perfecta para un día de excursión muy completo. Entre los lugares a visitar en Sassari están su casco antiguo, la antigua muralla protectora, la catedral de San Nicolás, la calle La Marmora y el antiguo castillo medieval. Si Sassari y sus playas todavía te han dejado con el sabor de querer ver más, a escasos 20 minutos está Puerto Torres, donde encontrarás a los turistas más elitistas o Eden Beach, una interminable playa. Un poquito más lejos, como a 40 minutos está el parque natural de Porto Conde, donde se encuentra la popular Gruta de Neptuno.