En París, subir a la Torre Eiffel, caminar por los Campos Eliseos y ver de cerca las gárgolas de Notre Dame son algunas de las experiencias que se quedan en la retina del viajero.
Y Bruselas es la capital de Bélgica pero también la capital europea. Es una ciudad que reúne las características de una gran urbe junto con el encanto de las pequeñas ciudades más tranquilas.