Dublín, la capital de Irlanda, es uno de los destinos urbanos más atractivos y animados de Europa, pues hace gala de una amplia oferta cultural, musical y de ocio. Fundada por los vikingos hace más de un milenio, el marcado carácter artístico y creativo de esta pintoresca urbe ha dado al mundo renombrados literatos como William Butler Yeats, galardonado con el Premio Nobel, Oscar Wilde o Bram Stoker, y míticos artistas como U2, Sinead O,Connor, Imelda May o Bob Geldof. Entre sus principales atractivos monumentales e históricos sobresalen la Biblioteca Nacional, el Trinity College, las catedrales de San Patricio y la Santísima Trinidad, y teatros de gran fama como el Gaiety o el Abbey. Visitar la Galería Nacional o el Museo de Arte Moderno es siempre un acierto seguro. Y, por supuesto, las fábricas de la cerveza Guinness y del whisky Jameson también lo son. Para profundizar en su legado musical acércate a The Irish RnR Museum Experience, a The Little Museum, con mucho material de U2, y a Windmill Lane Studio, donde han grabado los Rolling Stones, David Bowie o Lady Gaga, entre otros. Y si quieres disfrutar del barrio más famoso, musical y concurrido de Dublín, entonces la respuesta es el Temple Bar. Pasea por el enrejado de estrechas calles repletas de bares y pubs con actuaciones en directo a casi todas horas. ¡Vive intensamente Dublín!
Fundada en el siglo XI y designada capital de Escocia desde el año 1437, Edimburgo es la segunda ciudad más visitada del Reino Unido con cerca de 14 millones de turistas al año, tan solo superada por Londres. Situada en la costa oriental escocesa, a orillas del fiordo del río Forth y bañada por el mar del Norte, Edimburgo está dividida en dos: la ciudad antigua, The Old Town, que se extiende alrededor de la Royal Mile, su calle principal; y la ciudad nueva, The New Town, separadas ambas por los jardines de Princess Street. Estos distritos fueron designados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1995. Para empezar, nada mejor que perderse por el Old Town o la Royal Mile, una zona llena de magia donde se respira un encantador aire medieval. Allí se alza sobre una escarpada colina el imponente Castillo de Edimburgo, el monumento más representativo de la capital, donde podrás recorrer su magnífico interior y admirar de paso las joyas de la extinta corona escocesa y la capilla de Santa Margarita, el edificio más antiguo del país. Desde lo alto la colina de Calton Hill podrás contemplar una panorámica inmejorable de la ciudad, con el mar de fondo, y descubrir tanto el Monumento Nacional de Escocia, levantado en el siglo XIX en homenaje a los caídos en las guerras napoleónicas, como el Partenón de Edimburgo, que nunca llegó a terminarse. Además, entre las visitas imprescindibles están el Museo Nacional, que exhibe a la famosa oveja Dolly disecada; la Galería Nacional de Escocia, que muestra obras de grandes maestros como Rubens, Tiziano, Velázquez o Monet; el Museo de los Escritores, dedicado a Sir Walter Scott, Robert Burns y Robert Louis Stevenson; y la Scotch Whisky Experience, todo un lujo al alcance de tu boca.