El Palacio del Parlamento real es el principal edificio del patrimonio de Rennes, como gran obra arquitectónica del siglo XVII, pero sobre todo es uno de los grandes símbolos históricos y auténtico emblema de Bretaña. Situado en el corazón de la ciudad, la construcción de este icónico edificio comenzó en 1615 y finalizó en 1655, según los planos del arquitecto municipal German Gaultier que posteriormente serían revisados por el célebre Salomon de Brosse, autor además de las fachadas del palacio. Sin embargo, la sanción para la creación de un Parlamento de Bretaña data de 1554, consecuencia directa de la unión en 1532 del ducado de Bretaña con el Reino de Francia tras las famosas bodas de las duquesas Ana y Claudia con los reyes francos como parte de las llamadas "libertades bretonas". Un siglo después de su construcción, el arquitecto real Jacques Gabriel diseñó una plaza real a la altura de la estatua del monarca francés Luis XIV, el famoso Rey Sol, que por aquel entonces se alzaba orgullosa y vigilante frente al Parlamento de Bretaña. Aunque la asamblea perdió sus prerrogativas políticas durante la Revolución Francesa, el Palacio se convirtió a partir de 1804, y hasta nuestros días, en la sede del Tribunal Superior de Justicia de la región.

La Grand'Chambre (La Gran Sala) es la joya del palacio. Su techo artesonado es un auténtico tesoro arquitectónico y sus murales un ejemplo único del arte pictórico del siglo XVII. Concebida por el célebre Charles Errard, pintor de Luis XIV, la Grand'Chambre es una las poquísimas composiciones intactas que quedan del artista estrella de la época, siendo considerada en la actualidad como la obra capital del pintor francés. Los hermosos lienzos pintados en los artesones del techo llevan la firma de Noël Coypel, quien los pintara a mediados del siglo XVII. Otro de sus tesoros más destacados es un tapiz gobelino que representa la muerte del condestable Bertrand du Guesclin, de origen bretón, quien falleció de disentería durante una de sus muchas campañas en la Guerra de los Cien Años.

En febrero de 1994, el Palacio pasó por su momento más difícil al declararse un enorme incendio en el tejado que terminó con el derrumbe de gran parte del edificio, afectando incluso a la biblioteca, un hecho que conmocionó a toda Francia. En apenas cinco años de obras, el Palacio no solo fue restaurado y decorado a su antigua imagen, sino además acondicionado a las necesidades del siglo XXI, lo que causó un gran entusiasmo entre la población. El Palacio del Parlamento Real de Bretaña cuenta con la peculiaridad de ser uno de los pocos lugares de Francia donde conviven hoy en día justicia y turismo. Como sede del Tribunal Superior de Justicia es obligatoria la inscripción en la Oficina de Turismo para realizar una visita a este tesoro histórico-cultural, un monumento visitado por miles de turistas a lo largo de todo el año.

Ficha técnica
Le Parlement de Bretagne
Localización: Place du Parlement de Bretagne, 35000 Rennes.
Horario: visitas todo el año con inscripción obligatoria en la Oficina de Turismo.
Tarifa básica: A partir de 7,20 €
Tarifa reducida: A partir de 4,60 €

La hermosa Cathédrale Saint-Vincent-de-Saragosse de Saint-Malo, o Catedral de San Vicente de Zaragoza de Saint-Malo, es sin lugar a dudas el principal tesoro del patrimonio arquitectónico de la ciudad. Supone uno de los mejores ejemplos de la integración de los estilos gótico y románico en Europa, siendo catalogada con toda justicia como 'Monument historique' (monumento histórico) por el Gobierno francés. El templo, situado en la zona de Intra-muros de Saint-Malo, está dedicado a la figura de Vicente de Zaragoza, quien fuera diácono de San Valero de Zaragoza hasta ser encarcelado y torturado en tiempos del emperador romano Diocleciano, por lo que es venerado como San Vicente Mártir. La catedral fue sede del obispado católico de Saint-Malo desde el año 1146 hasta que el Concordato de 1801 lo abolió y repartió su territorio entre otros feudos eclesiásticos. Destaca su gran nave central y la espectacular luminosidad que dejan pasar las hermosas vidrieras laterales y el presioco rosetón situado en la parte posterior del coro, además de la emblemática torre del campanario que se proyecta desde fuera de la ciudad.

La catedral fue construida en el siglo XII por orden del obispo Jean de Châtillon sobre los cimientos de una antigua iglesia del siglo VII, ya que este emplazamiento resultaba más sencillo de defender que la ciudad de Aleth, donde se encontraba la Cathédrale Saint-Pierre. Los claustros, la espectacular nave y el cruce del crucero son elementos que todavía se conservan del edificio original del siglo XII, aunque la catedral ha experimentado varias reformas y ha tenido que ser restaurada en diversas ocasiones durante su extensa e intensa vida, de ahí su equilibrada y progresiva mezcla de estilos arquitectónicos. El coro sería construido en el siglo XIII y la torre no se terminaría hasta el siglo XV, mientras que las tres capillas del coro (que albergan las tumbas de Jacques Cartier y Duguay-Trouin) así como el lado sur de la catedral son del siglo XV, y la capilla sur data del siglo XVIII. A lo largo de los años, la Cathédrale Saint-Vincent-de-Saragosse ha sufrido varias reconstrucciones como las del lado norte del edificio, la fachada de la catedral o la torre del campanario, afectada por los ataques alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. Desde entonces, el edificio ha incorporado una nueva aguja y una roseta detrás del coro, iluminada por un vitral de Jean Le Moal que representa la historia de la ciudad, y el hermoso mobiliario conciliar obra del artista francés de arte sagrado contemporáneo Jean-Marie Pirot, apodado "Arcabas" por sus alumnos de Bellas Artes, lo que supone un paso más en la eterna metamorfosis de la Cathédrale de Saint-Malo.

Ficha técnica
Cathédrale Saint-Vincent-de-Saragosse de Saint-Malo
Localización: Place Jean de Châtillon, Intra-Muros, 35400 Saint-Malo.
Horario: abierto de lunes a sábado de 9:45h a 18:00h, y domingos de 13:00h a 18:00h.
Precio: gratuito.

Uno de los principales atractivos de Mont-Saint-Michel no se encuentra en la pequeña isla rocosa, sino a su alrededor en su propia bahía, inscrita por cierto en el Patrimonio Mundial de la Unesco. Durante la primavera se producen las mayores mareas de la Europa continental, llegando a existir una diferencia de hasta 15 metros entre el nivel del mar durante la marea alta y la baja, cuando la orilla del mar se sitúa a 15 metros de la costa. El momento más espectacular se produce cuando la marea sube a una gran velocidad y en momentos Mont-Saint-Michel se convierte de nuevo en una isla, por lo que resulta imprescindible consultar los horarios de las mareas en la Oficina de Turismo antes de pasear por las playas de la zona y evitar así peligros innecesarios. Para la óptima observación de este fenómeno natural, se aconseja llegar al Mont-Saint-Michel unas dos horas antes de la marea alta para contemplar este impresionante espectáculo marino desde la muralla, el claustro de la Abadía o desde el puente, aunque las carreteras de Grouin du Sud en Vains-Saint-Léonard y de Le Gué L'Epine en Val-Saint-Père son también excelentes miradores.

Una pasarela habilitada permite el acceso a Mont-Saint-Michel durante todo el año, excepto con marea exepcionalmente alta, aunque se aconseja recorrer el camino descalzo porque nunca se sabe cuando puedes acabar con los pies empapados. Para disfrutar al máximo de esta experiencia, se recomienda ir acompañado por un guía para descubrir en profundidad los secretos este "teatro de las más grandes mareas de Europa", como se le conoce. Se puede optar por una travesía clásica u otra más atípica, donde se pueden descubrir hasta arenas movedizas (Nota. Consultar en la Oficina de Turismo de Mont-Saint-Michel). Todo un espectáculo.

Auténtica joya del gótico flamígero, la Cathédrale Saint-Pierre-et-Saint-Paul, o Catedral de San Pedro y San Pablo, es una de las construcciones religiosas que más tiempo se ha tardado en finalizar a lo largo y ancho de toda Francia. Una pequeña placa tras sus puertas indica que la primera piedra del edificio fue colocada allá en 1434, aunque no vería su finalización definitiva hasta casi medio milenio después en el año 1893, cuando por fin terminó el 'tallado' de esta joya. A pesar del tiempo transcurrido hasta su culminación, sorprende la coherencia estilística de la catedral mantenida a lo largo de los años, respetando el diseño original del arquitecto Guillaume de Dammartin en estilo gótico flamígero, y cuyo trabajo fue continuado por Mathurin Rodier. Desde el exterior destacan las dos enormes torres tras las que se encuentra su nave de enormes dimensiones, mientras que en su interior se encuentran las hermosas tumbas de Francisco II y Margarita de Foix, por lo que fue fue declarada por el Gobierno de Francia como 'Monument historique' (monumento histórico) en 1862, incluso antes de que fuera terminada. En 1972 la catedral se vio seriamente afectada por un incendio, lo que obligó a su posterior restauración.

La Cathédrale Saint-Pierre-et-Saint-Paul, que se erige majestuosa sobre el emplazamiento de la anterior catedral de estilo románico de Nantes, está construida en toba calcárea en lugar de granito, más habitual en este tipo de edificios, lo que dota al complejo de una blancura extraordinaria tanto por fuera como por dentro. La fachada se encuentra enmarcada por dos torres de aspecto masivo, con bóvedas exquisitamente ornamentadas, y cuenta con la particularidad de tener un púlpito exterior para dirigirse a los fieles reunidos en la plaza. Tras ella se encuentra la gigantesca nave principal, que posee unas dimensiones de 103 metros de largo y 37,5 metros de altura, más alta incluso que la de Notre Dame de París. En su interior alberga uno de los grandes tesoros de la catedral y obra maestra del renacimiento francés: las estatuas yacentes y el sarcófago del duque Francisco II de Bretaña y su esposa Margarita de Foix, un conjunto realizado en mármol de Carrara por el escultor Michel Colombe y el arquitecto Jean Perréal en 1507, bajo encargo de la duquesa Ana de Bretaña para honrar la memoria de sus padres.

Otro de sus grandes atractivos son las criptas románicas del siglo XI que se conservan bajo sus cimientos y que conduce a otra cripta mayor del siglo XIX, que actualmente acoge una interesante exposición que repasa la historia de la catedral.

Ficha técnica 
Cathédrale Saint-Pierre-et-Saint-Paul.
Localización: Place Saint-Pierre, 44000 Nantes.
Horario:
- Catedral: en invierno de 8:30h a 18h. En verano de 8:30h a 19h.
- Criptas: primer domingo del mes de 14:30h a 18h. Del 1 de julio al 27 de agosto, todos los días de 10:00h a 19:00h.
Precio: Gratuito.

L'abbaye du Mont-Saint-Michel, o Abadía del Monte Saint-Michel, es la auténtica joya de Mont-Saint-Michel, no solo porque corona hermosa e impasible la pequeña isla rocosa, sino porque este antiguo priorato benedictino alberga auténticos tesoros arquitectónicos en estilos como el carolingio, el románico y el gótico. La escasez de terreno obligó a superponer las diferentes edificaciones necesarias para las actividades del monasterio, convirtiendo el complejo en una espectacular "megaestructura" en constante crecimiento desde su construcción en el siglo X y que ha recibido el apelativo de "Merveille de l'Occident" (maravilla del oeste). La importancia de la Abadía del Monte Saint-Michel queda refrendada por los reconocimientos recibidos, entre los que se incluye la catalogación como 'Monument historique' (monumento histórico) desde el año 1862 por el Gobierno francés, y figura en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1979, como parte del Monte Saint-Michel y su bahía. Una visita imprescindible.

La Abadía de Mont-Saint-Michel se divide en dos partes: la iglesia abacial y la "Marvelle", la zona donde habitaban los monjes. Alrededor de la iglesia original de estilo prerrománica, fundada en el año 966 bajo los auspicios de Ricardo I de Normandía, el complejo monástico fue creciendo de forma paulatina hasta hacer necesaria la construcción de una nueva iglesia en el siglo XI impulsada por el abad Ranulphe. El nuevo templo cuenta con tres capillas adyacentes: la capilla de Trente-Cierges, la cripta del coro y la capilla de Saint-Martin. La "Marvelle", por su parte, comenzó a ser edificada entre 1211 y 1218 e integra el claustro, el refectorio, la sala de trabajo y la sala del capellán, así como seis edificios de una planta, apoyándose todo el conjunto en la pendiente de la roca. Impresionante.

A lo largo de los siglos la abadía ha sufrido varios derrumbamientos y ha pasado por diversas reformas en distintos puntos de la historia, lo que ha dotado al conjunto de una estética muy especial donde se conjugan a la perfección distintos estilos arquitectónicos. Para descubrir todos sus secretos existen itinerarios guiados disponibles en francés, inglés, chino, italiano, japonés, portugués y español, pues esta auténtica maravilla es visitada todos los años por más de tres millones de turistas.

Ficha técnica 
L'abbaye du Mont-Saint-Michel
Localización: Le Mont-Saint-Michel.
Horario:
-Temporada baja: de 9:00h a 19:00h del 1 de septiembre al 31 de diciembre; y de 9:30h a 18:00h, del 2 de enero al 30 de abril. Abierto todos los días.
-Temporada alta: de 9:00h a 19:0 h, del 2 de mayo al 31 de agosto. Abierto todos los días.
Precio: entrada general, 10€. Reducida, 8€ + 3€ audioguía

Desde tiempos inmemoriales, los islotes de Grand Bé y de Petit Bé han ejercido de silenciosos centinelas en la bahía de Saint-Malo gracias a su estratégica situación en la playa de Bon Secours, puerta de entrada al estuario del río Rance. Ambas se encuentran a apenas unos cientos de metros tanto de la costa como del barrio de Intra-muros de Saint-Malo, por lo que se puede acceder a ellas a pie con marea baja o gracias a un corto viaje gratuito en bote. Desde allí se pueden observar y disfrutar unas espectaculares vistas panorámicas de todo su entorno: la ciudad de Saint Malo, el estuario del Rance, la localidad de Dinard e incluso Cap Fréhel, con sus escalofriantes acantilados. Y también descubrir los secretos de las ruinas y fuertes, e incluso de la tumba de Chateaubriand, que Petit Bé y Grand Bé protegen contra viento y marea.

Grand Bé alberga en la actualidad las ruinas de un antiguo fuerte militar, que atestigua la relevancia histórica de este emplazamiento a lo largo de los siglo, pero sobre todo es el lugar de descanso eterno de François-René de Chateaubriand, el escritor considerado como fundador del romanticismo francés además de destacado diplomático y político. Natural de Saint-Malo, Chateaubriand está enterrado en Grand Bé como expreso deseo del artista, con su tumba mirando al mar. En Petit Bé se conserva un fuerte que data del siglo XVII y que fuera construido bajo la tutela del ingeniero Siméon Garangeau. Esta pequeña fortaleza es todo un ejemplo de la arquitectura militar francesa y fue catalogada como 'Monument historique' (monumento histórico) por el Gobierno francés en 1921. Pero no sería hasta el año 2000 cuando el fuerte recuperaría todo su esplendor gracias a los trabajos de acondicionamiento llevados a cabo para permitir la entrada del público. Existen visitas guiadas que explican los sistemas de defensa estuario del Rance, una exposición comentada sobre el fenómeno de las mareas, maquetas de los cinco fuertes de la bahía de Saint-Malo y tres cañones en carros navales de los siglos XVIII y XIX. Una visita inolvidable.

Ficha técnica
Fort du Petit Bé
Localización: Plage de Bon Secours, Petit Bé, 35400 Saint-Malo.
Horario: abierto de lunes a sábado de 9:45h a 18:00h, y domingos de 13:00h a 18:00h.
Precio: adultos 5€, niños 3€.

El Parc du Thabor, apodado con justicia el "príncipe de los jardines", está considerado como uno de los parques más bellos no solo de Bretaña sino de toda Francia. Situado en el barrio Thabor-Saint Hélier, muy próximo al centro de la ciudad, es sin duda uno de los lugares más emblemáticos y punto de encuentro imprescindible para los habitantes y visitantes de Rennes. Remanso de paz en el bullicio de la ciudad, sus 10 hectáreas de superficie conforman un auténtico concentrado del arte de la jardinería y combina un jardín a la francesa (expresión del clasicismo basado en la simetría), un jardín a la inglesa (con dominio de las estatuas y el agua, donde se deja un espacio a la sorpresa y al "vagabundeo poético"), una "orangerie" (un invernadero dedicado principalmente para cítricos) y un importante Jardín Botánico, que alberga unas 3.120 especies diferentes e intercambia semillas con parques de todo el mundo. Junto al Jardín botánico se encuentra su famosa y excepcional rosaleda, donde se exhiben hasta 2.000 variedades distintas, desde rosas de pie y medio-estándar a especies de escalada o arbustos. Sumergirse en su belleza y aroma supone una auténtica experiencia para los sentidos.

Sus inicios se remontan al siglo XVII, cuando los monjes de Saint-Melaine transformaron un cerro, por entonces en las afueras de la ciudad, en un jardín hortícola. El lugar fue bautizado por los clérigos como Thabor, en referencia al monte que domina el lago Tiberiades en Israel. No sería hasta el siglo XVIII que viese su inauguración oficial como parque público, aunque desde entonces ha experimentado diversas mejoras y ampliaciones hasta alcanzar su majestuosidad actual. La intervención más destacada se produjo entre los años 1866 y 1868 de la experta mano de los célebres paisajistas alemanes Denis y Eugène Bühler, dos de los mayores expertos en la materia en el siglo XIX. Además de sus esplendorosos jardines a la francesa, la inglesa, la "orangerie" y el Botánico, el Parc du Thabor cuenta también con un típico quiosco de música así como con una imponente colección de esculturas, como "Le Tireur d'épine" (sacándose una espina), "L’Amour prenant un papillon posé sur une rose" (cogiendo una mariposa sobre una rosa), "La Chasse de Diane" (la caza de Diana), "Enfant à l'oie" (niño con la oca), "Faune à la flûte" (fauno con flauta) y la Estatua de Eurídice.

Ficha técnica
Le Parc du Thabor
Localización: Barrio Thabor-Saint Hélier, Place Saint Melaine, 3500 Rennes.
Horario: en verano, abierto todos los días de 7:30h a 20:30h. En invierno, abierto de 7:30h a 18:30h.
Entradas: Place Saint-Melaine, Allée Jeanne Guillon, Rue de Paris, Boulevard de la Duchesse Anne, Rue de la Palestine y Square Lucien Rose.
Precio: gratuito.

Antigua fortaleza medieval y palacio ducal entre los siglos XIII al XV, el Château des ducs de Bretagne, o Castillo de los duques de Bretaña, es el monumento estrella del patrimonio urbano de Nantes y el más antiguo junto con la Catedral de San Pedro y San Pablo. Primer baluarte defensivo del brazo del Loira en su confluencia con el océano, el castillo se empezó a construir en 1207 al pie de la muralla galo-romana de la ciudad por orden de Guy de Thouars, viudo de la duquesa Constanza de Bretaña, siendo conocido como castillo "de la Torre Nueva" o de Nantes. Erigido como centinela del Loira y sus intensas actividades comerciales, también sirvió para reafirmar el poder del ducado frente al de los condes y obispos de la región. Una idea similar motivaría la ampliación y reforma de la fortaleza en 1466, cuando Francisco I de Bretaña decidió contar con una fortaleza militar capaz de resistir al poder real francés, añadiendo siete grandes torres de granito unidas por una muralla de 500 metros de camino de ronda.

En 1532 el edificio pasaría a ser propiedad de la corona francesa tras el vasallaje por parte de la Bretaña al reino de Francia, siendo elegido como residencia bretona de los reyes durante los siglos XVI y XVII, lo que elevó el prestigio de Nantes. Desde entonces, el castillo dejó de acoger la colorida presencia de duques y reyes para convertirse en cuartel y prisión, siendo incluso requisado oficialmente por las tropas alemanas de ocupación durante la Segunda Guerra Mundial. A principios de la década de los 90 se puso en marcha un programa de restauración que duró 15 años para poner en el lugar que merece a este emblemático icono de la historia de Nantes y de Bretaña, que en 1840 sería declarado 'Monument historique' (monumento histórico) por las autoridades francesas.

A parte de su espectacular y rocoso exterior, el castillo alberga en su interior refinados tesoros arquitectónicos pues no hay que olvidar que la fortaleza era además Palacio Ducal. El edificio renacentista bautizado la Casa del Rey, ahora conocido como el "Pequeño Gobierno" y que sirvió para alojar a la familia real francesa, o la reconstrucción en estilo clásico del "Gran Gobierno" en la época de Luis XIV, son dos buenos ejemplos sin desmerecer su espectacular torre de la Corona de Oro. Conviene destacar que la iluminación nocturna del complejo obtuvo el premio europeo a la concepción lumínica Lumiville en 2007, ya que destaca aún más su belleza y complejidad arquitectónica.

El Château des ducs de Bretagne acoge además el Museo de Historia de Nantes, que ofrece gracias a una moderna presentación multimedia un completo recorrido a través de cinco siglos de historia de la ciudad, y exhibe una colección de más de 850 artículos repartidos en 32 salas.

Ficha técnica 
Château des ducs de Bretagne
Localización: 4 Place Marc Elder, 44000 Nantes.
Horario:
- Patio y murallas de acceso libre: todos los días de 8:30h a 19:00h. Del 1 de julio al 31 de agosto de 8:30h a 20:00h.
- Interior del castillo, museo y exposición: de 10:00h a 18:00h, lunes cerrado. Del 1 de julio al 31 de agosto, todos los días de 10:00h a 19:00h.
- Último acceso: media hora antes del cierre
Precio:
- Patio, murallas y jardines: gratuito.
- El museo y las exposiciones temporales: general 8€. Reducida 5€. De 18 a 25 años gratuito. +4€ Visita guiada. +2€ audioguía / videoguía en francés, inglés, español, alemán o italiano.