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Gran riqueza natural, artística y patrimonial
Uno de los destinos de interior españoles que más te enamorará es la provincia de León, ya que es perfecta para todo tipo de viajeros en cualquier momento del año: para los que buscan empaparse de historia, para los amantes del arte, para los que buscan disfrutar a través del paladar y, por supuesto, para aquellos que aman la naturaleza y practicar actividades al aire libre.
A lo largo y ancho de su provincia, con siete Reservas de la Biosfera declaradas por la UNESCO, encontrarás una riqueza patrimonial y cultural única, fruto de la impronta de los diferentes pueblos que los habitaron: astures y cántabros, romanos y suevos, visigodos y árabes… En algunos lugares, ¡sentirás como si no hubiera pasado el tiempo!
Castillos, fortalezas, palacios, templos religiosos, museos, piscinas naturales, montañas, formaciones geológicas de otro planeta, viñedos, una gastronomía rica basada en recetas tradicionales y productos típicos de la tierra… Todo esto y mucho más te esperan en esta región castellanoleonesa.
Sin duda, sus múltiples atractivos y la hospitalidad de sus gentes harán que desees volver muy pronto para seguir descubriendo los increíbles rincones de la provincia de León, cada uno de ellos único por sus características especiales y por su gran belleza. ¡Querrás regresar una y otra vez, te lo prometemos!
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La capital de la provincia, León, es uno de esos destinos a los que querrás ir una y otra vez. Su Catedral es la joya de la corona, de estilo gótico con influencias francesas y espectaculares vidrieras policromadas. Sin duda, el gran imperdible de la ciudad.
Desde aquí, paseando a lo largo de sus murallas, puedes llegar hasta los barrios Húmedo y Romántico, perfectos para tapear en sus múltiples bares y restaurantes. En el segundo, visita la Colegiata de San Isidro. En ella, además, se encuentra el Panteón de los Reyes, espacio conocido como la Capilla Sixtina del románico que no te defraudará.
En la plaza de San Marcelo, la Casa Botines de Gaudí te sorprenderá por su contraste con el resto de edificios más antiguos, ya que este presenta un estilo modernista y fresco, como lo fue el propio artista catalán. Al lado, ve al palacio renacentista de los Guzmanes, de gran referencia histórica en la ciudad, donde destacan su preciosa fachada, el balcón presidencial, la galería de arcos acristalados, el patio interior y el pozo decorativo.
A pocos minutos de la capital, no olvides pasar por la villa romana de Navatejera y el Santuario de la Virgen del Camino. ¡Te enamorarán!
Este territorio se sitúa al noreste de la provincia de León y es uno de sus grandes desconocidos, ya que ha permanecido ajena al turismo de masas, manteniendo intactos sus atractivos turísticos. Es el destino de naturaleza por excelencia, con impresionantes paisajes montañosos, ¡donde todo te espera!
Uno de sus lugares más destacados es el Parque Nacional de los Picos de Europa, donde comienzan rutas como la del Cares y la Senda del Arcediano. En él, además, se pueden descubrir puntos históricos como la Iglesia de Corona, que, según la leyenda, acogió la celebración de la coronación de Pelayo.
También te sorprenderán los llamados “fiordos leoneses”, resultado de una inundación de agua dulce del embalse de Riaño en valles de grandes laderas. Saca el móvil o la cámara y ponte a fotografiar el impresionante reflejo del azul del cielo y del verde de las montañas en sus cristalinas y limpias aguas.
En Montaña de Riaño, además de respirar aire puro y practicar actividades deportivas, podrás conocer su interesante patrimonio monumental: el conjunto histórico-artísticos de Lois, el Monasterio de Santa María de Gradefes, el Santuario de la Virgen de la Velilla, el castillo palacio de los Álvarez Cevedo y muchos más.
Las Montañas del Teleno, al sur de la provincia de León, es un cruce de caminos de la Vía de la Plata y del Camino de Santiago, donde se combinan naturaleza, vestigios del pasado y antiguas tradiciones.
En Astorga, declarado Bien de Interés Cultural, no te pierdas sus murallas romanas, el Palacio Episcopal, una de las pocas obras de Gaudí fuera de Cataluña; y la Catedral, que tiene una preciosa fachada.
Muy cerca de la ciudad se encuentra Castrillo de los Polvazares, un increíble pueblo reconstruido en el siglo XVI con calles empedradas y casas de piedra donde habitaban los antiguos arrieros maragatos. Te recomendamos ir a uno de sus restaurantes para probar el cocido maragato, famoso por servirse al revés: primero la carne y después la sopa. ¡No te decepcionará!
Tampoco puedes perderte el conjunto histórico-artístico de Santiago Millas, de la Edad Media, que conserva casas de tipo arriero con sus viejas cocinas de cúpula. Para finalizar, te aconsejamos hacer una ruta por el patrimonio arqueológico y la minería romana de las Montañas del Teleno, sobre todo en la comarca de La Cabrera, que te sorprenderán por la gran cantidad de vestigios del pasado de un valor difícil de calcular.
Cuatro Valles ocupa gran parte de la montaña noroccidental leonesa y cuenta con un valioso patrimonio cultural y natural que podrás descubrir con cinco interesantes rutas guiadas. “Las Zancas” discurre a orillas del río Omaña y permite conocer bosques de ribera, construcciones de la aldea de La Omañuela y costumbres de sus habitantes, como la práctica de las “zancas” (usadas antiguamente para cruzar el río) y el juego de puntería de la “chita”.
“Los Molinos”, en Sosas de Laciana, es ideal para hacer un repaso por sus recursos y su arquitectura rural, compuesta por casas, hórreos, lavaderos y un antiguo molino rastrero. También podrás admirar su pasado romano con “El oro de Roma”, que evidencia su tradición minera.
En relación a la anterior, la ruta de “El Faedo” va por un viejo camino minero con el que descubrir sus sistemas naturales, pudiendo conocer herramientas e instrumentos de la vida en las galerías.
Para finalizar, en Cuatro Valles podrás volver al pasado en los Barrios de Luna, donde se evidencian formaciones geológicas de entre los 550 y 300 millones de años. El guía te ayudará a trasladarte a esos tiempos y a descifrar las rocas que muestran el origen de esta zona montañosa.
Si te encantan los castillos, ¡este es tu destino! Ya sea en primavera, verano u otoño, no puedes perderte este recorrido por sus cinco principales fortalezas, todas ellas declaradas Bien de Interés Cultural.
Comienza en Toral de los Guzmanes, en la ribera del Esla, donde se encuentra el Castillo-Palacio de Toral de los Guzmanes, cuya construcción data de los siglos XIII-XIV. En su interior se encuentran un pequeño museo etnográfico y el Museo del Botijo. La próxima parada es el Castillo de Coyanza, del siglo XV, en Valencia de Don Juan. Su arquitectura gótico-militar te sorprenderá, con torres circulares que lo diferencian del resto.
Continuando por la carretera de Villamañán hasta Laguna de Negrillos, admirarás los restos de un espectacular castillo. Actualmente verás una reconstrucción del siglo XV, con una torre del homenaje cuadrangular. Después, en Alija del Infantado, sobre la ribera del río Órbigo, puedes contemplar el Castillo de los Pimentel o Castillo de los Duques del Infantado, cuyos cubos y torres sobre los muros están en buen estado.
Finaliza la ruta en el Castillo de Quintana, en Quintana del Marco, que perteneció a los Condes de Alba de Aliste. Destaca su torre del homenaje bien conservada, ya que el resto está en ruinas.
Esta es una de las zonas más representativas de la provincia, ya que está formada por lugares de gran interés como Ponferrada, Villafranca del Bierzo, el Monumento Natural Las Médulas, castillos y amplios viñedos.
En Ponferrada, visita su casco histórico, el Castillo del Temple, la Torre del Reloj y la Basílica de Nuestra Señora de la Encina. En Villafranca del Bierzo, no te pierdas la Colegiata de Santa María del Cluny, el Castillo del Marquesado y el Monasterio de Santa María de Carracedo.
Si buscas la naturaleza más singular, el Monumento Natural Las Médulas es tu destino. Se trata de un espacio de contrastes que fue la mayor mina del Imperio Romano y la mejor muestra de cambios que ocasionó la explotación del oro. En él encontrarás valles, el Lago Carucedo, campos de cultivos y grandes castañares, su seña de identidad. También podrás descubrir su flora, con el predominio de jaras, brezos, sauces, álamos, encinas, castaños…; y su fauna, con especies como el jabalí, el urogallo, el corzo, el gato montés y aves insectívoras, entre otros.
Finaliza tu viaje por este territorio con una buena ruta por viñedos emblemáticos como los de Mencía y Godello, mientras degustas la mejor gastronomía autóctona.
En esta zona encontrarás un rico patrimonio arquitectónico. En Sahagún vivirás una experiencia histórica visitando su plaza Mayor, que aún conserva sus entradas originales; y sus edificaciones sagradas, como la Iglesia de San Tirso, el Santuario de la Peregrina, el Monasterio de San Pedro de las Dueñas y la Iglesia de San Lorenzo.
En Valderas podrás ver las los restos de su antigua muralla y caminando por sus bonitas calles te toparás con la iglesia de San Juan del Mercado, el Ayuntamiento, algunos palacetes señoriales y el Museo de Arte Sacro. No olvides probar aquí su riquísimo bacalao de Valderas.
El patrimonio artístico de Grajal de Campos, de estilo renacentista, está compuesto por un castillo, un palacio y una iglesia que le han otorgado el tratamiento de Conjunto Histórico-Artístico. Sin duda, te sorprenderá estar ante uno de los pueblos más antiguos de León.
También tienes que visitar Mansilla de las Mulas con su espectacular Monasterio de Santa María de Sandoval, las murallas urbanas y el puente sobre el río Esla. No puedes irte de este territorio sin pasar por el Yacimiento de la Antigua Ciudad de Lancia, donde se hallaron termas, un mercado y cerámicas y monedas de los íberos, entre otros.
Descubre que tiempo hará en tus vacaciones
Debido a la protección natural que hacen las cadenas montañosas sobre la provincia de León, registra un clima de grandes contrastes entre verano e invierno. La mayor parte del tiempo es seco, sin fuertes vientos; aunque en algunas partes (sobre todo el noroeste) se nota la influencia atlántica con algo más de lluvia y temperaturas más suaves.
En primavera las lluvias van cediendo al sol y el clima se modera, dando paso al verano, que, aunque corto, es muy intenso, con días en los que la temperatura puede superar los 35º C, aunque los tolerarás perfectamente gracias a su ambiente seco. Por las noches, además, no tendrás problema en dormir con tranquilidad, ya que son frescas y muy agradables.
Si viajas a la provincia en otoño, verás sus montañas y valles vestidos de colores dorados, más bellos que nunca, con más lluvias y suaves vientos. Y, en invierno, los días son más fríos, con el color blanco de la nieve protagonizando algunos amaneceres.