Toledo es una de esas ciudades que transmite historia por todos sus costados, ya que en ella convivieron durante siglos cristianos, judíos y musulmanes, convirtiéndose en la “Ciudad de las Tres Culturas”. Cada una de ellas legó a la ciudad su herencia arquitectónica y cultural, que podrás descubrir caminando por su casco antiguo. Inicia la ruta en la Puerta de Bisagra y llega a la plaza de Zocodover, rodeada de soportales, tiendas y restaurantes. Muy cerca, visita la mezquita del Cristo de la Luz, las iglesias de San Sebastián y Santa Eulalia; la iglesia de Santiago del Arrabal, conocida como la catedral del Mudéjar; y las sinagogas de Santa María la Blanca y del Tránsito, que alberga el Museo Sefardí.

Callejeando por el que fuera el zoco árabe, podrás sentarte en múltiples bares y restaurantes para degustar algunos de los platos principales de su cultura mestiza, fruto de las influencias moriscas, sefarditas y cristianas, como la perdiz a la toledana, las carcamusas, el venado, el cocido “tres vuelcos”, el cochifrito y muchos más.

Al atardecer, no olvides admirar la belleza de Toledo desde el mirador del Valle. ¡Volverás a casa con unas fotos increíbles!