Thon Hotel Orion

“Localización!”

Perfecta ubicación muy céntrico a un paso del funicular y la zona monumental. Hotel muy cómodo y moderno, la habitación perfecta , el cuarto de baño muy completo y moderno y el desayuno muy bueno y variado. Personal y trato inmejorables. Recomiendo!

“Excelente Hotel”

Hotel muy lindo y acogedor, todo tal cual las fotos.Excelentemenete ubicado, esta cerca de todo sin estar muy en el centro. El colectivo del aeropuerto te deja a 2 cuadras de alli. Coordialidad de quienes lo atienden, gente muy atenta y amable.

“Buen desayuno, limpio y razonablemente céntrico. Habitación pequeña para tres personas.”

Me gustó: El hotel está ubicado en un sitio tranquilo. No está realmente en el centro, pero sí al lado de algunos puntos de interés, especialmente del barrio hanseático, y a una distancia agradable dando un paseo del resto. Lo mejor del hotel quizás sea el desayuno. Hay gran variedad de alimentos… Más

Me gustó: El hotel está ubicado en un sitio tranquilo. No está realmente en el centro, pero sí al lado de algunos puntos de interés, especialmente del barrio hanseático, y a una distancia agradable dando un paseo del resto. Lo mejor del hotel quizás sea el desayuno. Hay gran variedad de alimentos dulces y salados, fruta, bebidas y buen café. El personal que lo atiende es amable. El espacio también es agradable, luminoso gracias a los grandes ventanales y con asientos cómodos. Habitación y baño muy limpios. Se agradece la cafetera y la nevera de cortesía. Las camas son cómodas. Nos tocó un piso alto con unas vistas razonablemente buenas. La luz y el espejo del baño muy buenos, ideal para afeitado, maquillaje, etc. No me gustó: La persona que nos atendió en recepción fue más seca que un guijarro. Se limitó a decir hola y adiós y a darnos las tarjetas de la habitación sin explicarnos a penas nada del funcionamiento del hotel, zonas comunes, etc. Para colmo de males tuvimos que volver a recepción porque una de las tarjetas no funcionaba. Viajamos tres personas (Habitación Doble Superior), por lo que una tuvo que dormir en el sofá-cama. No era nada cómodo y, además, ocupaba casi todo el espacio disponible en la habitación. Apenas quedaba suelo libre para poder movernos alrededor de las camas y el sofá-cama. Realmente falta espacio o sobra sofá-cama. Hasta el punto de no poder sacar la silla de debajo del escritorio y a duras penas poder abrir la nevera. El armario es ridículamente pequeño. Se supone que había un paraguas de cortesía, pero sólo estaba el cartel informativo de su existencia. El baño también es demasiado pequeño. Uno de los dispensadores de jabón, el de la ducha, no funcionaba correctamente. La mampara de la ducha es demasiado pequeña y las salpicaduras mojan el suelo. Realmente no hay donde colgar las toallas de ducha usadas de forma que se sequen, lo que obliga a secarte con una toalla húmeda o a tener que cambiarlas cada día. El hotel no está realmente en el centro. Siendo generosos está, como mucho, en "las afueras" del centro. Para nosotros no fue ningún problema, pero es una dato a tener en cuenta. Hay varios sitos de interés, que podrían considerarse como el centro, a unos 10-15 minutos a pie.

Menos

“Más céntrico imposible ”

Buen hotel situado a pocos minutos del barrio Alemán de Bergen. Habitaciones cómodas y limpias, con una decoración moderna y funcional. Desayuno completo muy variado y con opciones sin gluten, muy importante!