Arima Onsen Taketoritei Maruyama

“Una noche no fue suficiente. Una vez en una experiencia de por vida.”

Hice esta reserva unos 10 meses antes de nuestro viaje y me quedé impresionado con lo agradable que era. Como no eran los típicos hoteles de la cadena estadounidense en los que me alojo, no estaba seguro de qué esperar. La habitación no estaba lista cuando llegamos, así que esperamos en el vestíbul… Más

Hice esta reserva unos 10 meses antes de nuestro viaje y me quedé impresionado con lo agradable que era. Como no eran los típicos hoteles de la cadena estadounidense en los que me alojo, no estaba seguro de qué esperar. La habitación no estaba lista cuando llegamos, así que esperamos en el vestíbulo durante unos 20 minutos. No es un problema - tenían gaseosa de cortesía, aperitivos, helado y capuchino. Eso no es algo que normalmente se ve en un hotel estadounidense. Justin en la recepción que habla inglés perfecto y sabe mucho sobre deportes americanos, nos acompañó a nuestra habitación. Él y todos los demás están tan relajados y tranquilos, que es exactamente la sensación de todo el hotel. Justin vino a rescatarnos cuando no teníamos dinero para pagar la cena en un restaurante. Por supuesto, se lo devolvimos pero nos ayudó a salir de una situación incómoda. Como nota adicional, lo que descubrimos como Arima es un pueblo pequeño, muchos lugares solo aceptan efectivo, así que asegúrese de visitar el cajero automático! Ahora lo más destacado - el onsen en la habitación. No queríamos irnos, fue increíble tener un onsen en la habitación. Mientras que los otros onsen en el hotel son igual de increíbles, tener uno en la habitación que se puede sumergir en y fuera cuando quieras fue algo que nunca hemos experimentado y fue el punto culminante de nuestro viaje a Japón. Nos encantó el hotel, nos encantó la ciudad y nos encantó nuestra habitación. ¡Tenemos que volver a Japón pero necesitamos esa habitación! Estoy escribiendo esta crítica ya que no tenemos absolutamente nada negativo que decir sobre este lugar. Todo fue increíble. Incluso había una lavadora gratuita en el edificio en caso de que quieras lavar la ropa. Hay bebidas gratis en tu habitación de todo tipo si quieres agua, cerveza, refresco o jugo. Hay televisión por cable en su habitación. Hay un autobús gratuito que te recogerá en la estación de autobuses y te llevará al hotel y a la ciudad y viceversa. Hay un montón de restaurantes en la ciudad donde se puede comer. Todo es fácil, fácil, fácil. También se puede ir andando al pueblo, no hay problema, está a unos 10 minutos andando, hay un mapa de google del que se toma una foto con un atajo. Si puedes, quédate más de una noche. Una noche simplemente no fue suficiente.

Menos

“Gran servicio”

Vinimos aquí hace 10 años y volvimos a visitarlo recientemente. El ambiente y el servicio siguen siendo maravillosos. La habitación que reservamos era espaciosa y el onsen es muy relajante. Después de que nos fuimos, mi papá dejó algo en el hotel y el personal amablemente hizo los arreglos para que… Más

Vinimos aquí hace 10 años y volvimos a visitarlo recientemente. El ambiente y el servicio siguen siendo maravillosos. La habitación que reservamos era espaciosa y el onsen es muy relajante. Después de que nos fuimos, mi papá dejó algo en el hotel y el personal amablemente hizo los arreglos para que lo entregaran en nuestro próximo hotel. Llegó muy bien empaquetado al día siguiente. Quedamos muy impresionados. Ojalá tengamos la oportunidad de volver a disfrutar.

Menos

“¡¡¡Absolutamente increible!!!”

Subimos la montaña, caminando, hasta nuestro hotel, un autobús de enlace se detuvo junto a nosotros y señaló el nombre del hotel en el costado. Adormilado por caminar millas bajo un calor de 100, los deseché porque no nos quedamos en hoteles lo suficientemente lujosos como para que un autobús de en… Más

Subimos la montaña, caminando, hasta nuestro hotel, un autobús de enlace se detuvo junto a nosotros y señaló el nombre del hotel en el costado. Adormilado por caminar millas bajo un calor de 100, los deseché porque no nos quedamos en hoteles lo suficientemente lujosos como para que un autobús de enlace lo busque cuando se espera su llegada. 30 minutos después, empapados en sudor y cargando mochilas que se han convertido en ladrillos de concreto, llegamos y los encontramos esperando afuera del hotel con paños para secarse el sudor. Resulta que hoy SOMOS esas personas elegantes que se hospedan en hoteles con autobuses de enlace. Estábamos en una habitación ryokan de estilo japonés tradicional, con 9 onsens en el lugar y nos proporcionaron pijamas y ropa típica japonesa para usar en el hotel y en la ciudad si así lo deseábamos. Cenamos en un pequeño restaurante japonés de barbacoa que nos recomendó el hotel y, sinceramente, fue la mejor comida que he probado desde que llegué a Japón. El transbordador nos llevó y nos trajo de vuelta. Cuando regresamos a la habitación, descubrimos que la habían instalado con futones tradicionales en el piso, y después de un onsen más, en el que me empapé en agua dorada, acosté la cabeza y dormí lo mejor que he tenido en mucho tiempo. A la mañana siguiente, después de otro onsen relajante, preguntamos sobre los lugares para desayunar y 1 en particular. Resulta que el sitio web estaba equivocado y el restaurante no estaba abierto. Sugirieron una alternativa que aceptamos felizmente y dijeron que nos iríamos en aproximadamente 30 minutos cuando abriera. Sin embargo, solo unos momentos después, el caballero regresó para decirnos que el restaurante que queríamos estaba abierto y listo para nosotros. El hotel había llamado y preguntado si estarían dispuestos a abrir y atendernos. Solo lo descubrimos en el restaurante cuando les dimos las gracias efusivamente por el delicioso desayuno. El servicio, las comodidades y el hotel superan las expectativas y son de primera categoría. Este fue nuestro lugar favorito para hospedarnos en todos nuestros viajes japoneses.

Menos