Nueva Zelanda e Islas del Pacífico: Auckland y Fiji, a tu aire con estancia en playa

Apenas hace unas décadas una gran desconocida, la inmortal trilogía cinematográfica de “El Señor de los Anillos” puso a Nueva Zelanda en un lugar privilegiado en el mapa turístico internacional. Sus inolvidables y pintorescos paisajes, escenarios de excepción en gran parte del rodaje de la obra maestra de Peter Jackson, han quedado ya grabados en el imaginario colectivo mundial.

Su metrópolis más grande, cosmopolita y animada es Auckland, situada en North Island (Te Ika ā Maui, en maorí), una de las dos islas principales del país, separada de South Island por el estrecho de Cook. Mitad ciudad mitad puerto deportivo, Auckland es conocida como “la ciudad de los veleros” gracias a su espléndida ubicación geográfica y a sus magníficas y modernas instalaciones, amén de su maravilloso Museo Marítimo Nacional. Además de sus excelsas condiciones para los deportes acuáticos, la ciudad alberga numerosos atractivos, entre los que se encuentran el Museo de Auckland, versado en la cultura maorí; la Sky Tower, un imponente edifico de 328 metros de altura que ejerce de mirador y trampolín de “bungy”; la Auckland Art Gallery, que narra las historias locales a partir de las artes visuales; y la Harrah’s Sky City, donde abundan los casinos, restaurantes, cafés y bares. Disfruta de la atractiva vida nocturna, moda y artes de la puerta a Nueva Zelanda.

Las Islas Fiji, con sus 300 islas tropicales, es la imagen del paraíso en la tierra. De fina arena blanca, rodeada de verde vegetación tropical y las aguas azules propias de los mares del Sur, sus hermosas playas se han convertido en un destino anhelado por turistas de todo el mundo. En ellas, cada detalle del paisaje te hará sentir en armonía con la naturaleza. Existen playas para todos los gustos: desde playas turísticas rodeadas de lujosas instalaciones, como las de Coral Coast, Mamanuka o Denarau, hasta litorales salvajes como los de Yasawa. Tras inolvidables atardeceres, las antorchas iluminan las playas creando un ambiente único que acompaña a los acordes de la música local y las mejores recetas de la cocina local.