Tenerife, conocida como la “isla de la eterna primavera”, disfruta de un agradable clima beneficiado por los vientos alisios, la corriente marina fría de las canarias y su destacado relieve. No te puedes perder el Parque Nacional del Teide. Es una parada obligatoria.
Y, por sus increíbles paisajes, sus imponentes volcanes, sus profundos bosques, sus acogedoras playas, y por sus cielos llenos de estrellas, está la isla de La Palma, conocida como la isla bonita.