Durante la visita a Pekín podréis adentraros en la Ciudad Prohibida, la fortaleza desde la que gobernaron los emperadores durante más de 500 años, y en otros lugares históricos como el Palacio de Verano y el Templo del Cielo. Pekín es además el punto de partida ideal para conocer una de las Siete Maravillas del Mundo, la Gran Muralla China.
Situada en el fértil valle del río Wei, Xian era el extremo oriental de la famosa Ruta de Seda. La ciudad saltó a la fama internacional en el año 1974, cuando se encontraron en sus proximidades los inmortales guerreros de terracota del emperador Qin Shi Huang, uno de los mayores hallazgos arqueológicos de la historia.
Shanghái posee un aspecto cambiante que se renueva día a día con la construcción de imponentes rascacielos que emergen en el área de Pudong, entre los que destacan la peculiar Torre de la Televisión, el Shanghai World Financial Center y la Torre Jin Mao.