Un gran viaje para descubrir algunos de los enclaves más significativos de Kenia, sinónimo de grandes espacios, de fauna en libertad, de puestas de sol que pintan de rojo la sabana y de la calma que emana de la naturaleza, como Masai Mara, el Lago Naivasha y el magnífico Amboseli.
Y como broche de oro, una estancia en la isla de los misterios y las especies, la siempre enigmática Zanzíbar.
¿Se te ocurre un plan mejor?