Representando un Japón poco conocido, distante y casi abandonado en el extremo occidental de la isla de Kyushu, al oeste del Mar de China, la isla Kamigoto cuenta la inesperada historia del Imperio del Sol Naciente. Refugio de los cristianos que huían de la prohibición de practicar la fe católica en el siglo XVII, en la era Edo, cada pueblo conserva huellas de esta influencia que aún están muy presentes, como lo demuestran los numerosos edificios religiosos que salpican la isla. Famosa por su naturaleza exuberante y preservada, con bosques tropicales y costas escarpadas, Kamigoto cuenta con tesoros naturales como la playa de Hamaguri, un paraíso acuático de arena fina rodeado de aguas turquesas y rodeado de fascinantes picos verdes.