Siros, o Sira, es la «Dama de las Cícladas», ya que está rodeada por muchas de las islas que componen el conjunto de las Cícladas. Isla animada y preciosa, repleta de luz y de edificios de interés arquitectónico, está activa a todas horas y concentra gente de todas las edades. Siros tiene una parte montañosa al norte, donde domina en Áno Meriá o Áno Síros la iglesia católica de san Jorge construida en época medieval, y se caracteriza por senderos, puentecillos y playas secretas; al sur está la llanura, con preciosos pueblos y playas de un intenso azul. No se olvide de probar las delicias locales: el famoso loukoúmi de Siros, con raros sabores como rosa, lentisco o bergamota, y también la torta de halvás, que se prepara con miel local y almendras tostadas. Pruebe y llévese consigo el queso «San Miháli» (DOP), excepcional gruyère de la región homónima de Áno Meriá, así como las longanizas de Siros, preparadas con hinojo.