Una playa convertida en enclave turístico privilegiado
Matalascañas es una localidad como tal, sino que en realidad consiste en una enorme playa situada en el municipio de Almonte, ubicado en la zona suroeste de Andalucía, en la provincia de Huelva. La belleza y la enorme extensión de esta hermosa playa provocaron la construcción de una urbanización que, con el tiempo, ha ido creciendo y desarrollándose hasta obtener entidad propia como destino turístico, llegando a alcanzar los mas de 50.000 habitantes en la temporada estival. Su privilegiada localización, en pleno Parque de Doñana (que rodea completamente a Matalascañas), convierte a esta zona en un autentico paraíso natural, acompañado de una deliciosa y cuidada gastronomía y unas fiestas tan celebres como la Romería del Rocío, puro patrimonio inmaterial.
De hecho, se suele decir que el municipio de Almonte se puede definir citando tres cosas: la playa de Matalascañas, el Parque de Doñana y la tradición rociera. Pero la zona alberga muchos mas atractivos, entre los cuales destaca su enorme patrimonio monumental y cultural, plagado de construcciones religiosas, civiles y defensivas que merece la pena destacar.
La playa de Matalascañas, que cuenta con la Bandera Azul que certifica su calidad y sus servicios, es con sus más de cuatro kilómetros de longitud motivo suficiente para visitar Matalascañas… Y quedarse. Si bien su zona mas cercana a la urbanización esta mas concurrida y cuenta con chiringuitos, alquiler de tumbonas y otros servicios, a medida que el arenal se adentra en el Parque Natural de Doñana, se va convirtiendo en un paraíso natural, virgen y tranquilo, para viajeros que sepan apreciar los rincones solitarios y poco concurridos. Esta playa es una de las más largas de la bella Costa de la Luz de Huelva.
Además de los atractivos naturales y culturales, en Matalascañas podremos disfrutar de la deliciosa gastronomía de Huelva (con sus gambas como estrellas de las mesas) y de Almonte, así como de lugares perfectos para la practica de determinados deportes como el golf. De hecho, el campo de dieciocho hoyos situado en el Parque de Doñana es todo un emblema de la zona, y uno de los más atractivos y visitados de nuestro país.
La playa de Matalascañas, que cuenta con la Bandera Azul que
certifica su calidad y sus servicios, es con sus más de cuatro
kilómetros de longitud motivo suficiente para visitar Matalascañas... y quedarse.
Matalascañas es una localidad como tal, sino que en realidad consiste en una enorme playa situada en el municipio de Almonte, ubicado en la zona suroeste de Andalucía, en la provincia de Huelva.
Además de los atractivos naturales y culturales, en Matalascañas podremos disfrutar de la deliciosa gastronomía
de Huelva y de Almonte,
así como de lugares perfectos para la práctica de deportes.